¡Aproveche las lluvias, renueve praderas!

Eudes Antonio Garzón, médico veterinario zootecnista y profesional de Fedegán – FNG en la región de La Guajira y el Cesar, hace hincapié en la importancia de aprovechar este momento para renovar las praderas, especialmente en aquellas de las fincas que han sido más degradadas.

La renovación de praderas es una práctica fundamental para mantener la productividad y la calidad del pasto en los potreros. Sin embargo, Garzón señala que este proceso puede resultar costoso debido a la mecanización requerida, el precio de las semillas y el valor de la mano de obra. Ante esta situación, es fundamental encontrar estrategias que permitan optimizar recursos y maximizar los beneficios.

Una de las recomendaciones clave es comenzar con pequeñas áreas de renovación, priorizando aquellas zonas más degradadas de las fincas. Al enfocarse en áreas específicas, los ganaderos pueden minimizar los costos y maximizar la eficiencia de sus recursos.

Además, al establecer pastos que se adapten a las condiciones locales, se garantiza una mayor resistencia y productividad a largo plazo.

Las lluvias, que han sido generalizadas desde el sur hasta el centro de la región, han proporcionado el entorno ideal para iniciar este proceso de renovación. (Lea en CONtexto ganadero: Conozca por qué la paramphistomiasis puede matar a sus bovinos)

Con el suelo húmedo y las condiciones climáticas favorables, es el momento perfecto para sembrar y establecer nuevas praderas. Para aquellos en el norte del Cesar, donde las lluvias comenzaron este fin de semana, aún hay tiempo para prepararse y aprovechar esta oportunidad.

Garzón enfatiza la importancia de planificar cuidadosamente el proceso de renovación de praderas. Esto incluye la selección de las semillas adecuadas, la preparación adecuada del suelo y la implementación de prácticas de manejo del pasto que promuevan su crecimiento saludable.

Además, es fundamental considerar el manejo sostenible de los recursos naturales y la conservación del suelo para garantizar la viabilidad a largo plazo de las praderas renovadas. A esto hay que sumarle los beneficios directos para la productividad ganadera, la renovación de praderas también puede tener impactos positivos en el medio ambiente.

Una estrategia clave en la renovación de praderas para los ganaderos del Cesar es el uso de técnicas de conservación de agua y suelo como la siembra en curvas de nivel y la siembra directa, que pueden ayudar a reducir la erosión del suelo, mejorar la infiltración del agua y conservar la humedad del suelo durante periodos secos.

Potreros sanos y cultivos bien establecidos pueden ayudan a prevenir la erosión del suelo, mejorar la calidad del agua y proporcionar hábitats para la vida silvestre. Por lo tanto, esta práctica no solo beneficia a los ganaderos, sino también contribuye a la conservación y la sostenibilidad del paisaje agrícola.

Asimismo, la gestión integrada de plagas y enfermedades es esencial para mantener la salud de las praderas a largo plazo. Los ganaderos deben monitorear regularmente sus cultivos en busca de signos de infestación y tomar medidas preventivas y correctivas según sea necesario. (Lea en CONtexto ganadero: Conozca por qué la paramphistomiasis puede matar a sus bovinos)