En el departamento de Boyacá el sector lechero indicó que cerca del 10% de las ganancias se perdieron como consecuencia de las manifestaciones que se dieron en el primer día del paro agrario. En otras regiones del país, ganaderos dicen sentirse abandonados por el Gobierno.
Tras el primer día de paro, uno de los departamentos que más afectaciones tuvo fue el de Boyacá, allí los más perjudicados fueron los productores de leche. A pesar de que los dirigentes de Dignidad Agropecuaria aseguraron que las manifestaciones serían pacíficas, el paso en las vías tuvo una evidente disminución de automotores, lo que originó que en varios lugares del departamento no se pudiera acopiar el líquido con normalidad.
“En algunas zonas, las industrias que nos acopian la leche se abstuvieron de entrar y recoger, hoy (por ayer) ya hubo un porcentaje del producto que no fue recogido, estamos hablando de entre el 10% y el 20%. Aquí es cuando empieza a presentarse la misma preocupación del año pasado: la región tuvo una pérdida grande”, explicó Víctor Manuel Fajardo Becerra, presidente de la Federación de Ganaderos de Boyacá, Fabegán. (Lea: Con propuestas del pasado, Gobierno busca frenar paro campesino)
Fajardo aseguró que normalmente se acopian cerca de 400 mil litros diarios y por cada litro de leche se pagan $850, es decir que, entre $34 y $68 millones fueron las pérdidas que el sector lechero de esta región registró el pasado 28 de abril, primer día del paro agrario nacional.
Y aunque en otras cuencas lecheras, como Antioquia, Cundinamarca y Nariño las manifestaciones no ocasionaron una disminución en el acopio de leche, los representantes de estas zonas dijeron en diálogo con CONtexto ganadero que los productores se sienten a la deriva y temen que pueda presentarse el mismo escenario que durante el paro que tuvo lugar en 2013, cuando tuvieron que vender e incluso perder la leche que producían.
“Ayer se presentaron marchas pacíficas en varias regiones, pero en ninguna parte se presentaron cierres viales que afectaran al sector. Sin embargo, nosotros no tenemos un plan B si se llega a dar lo mismo que el año pasado, lo único que se podría hacer es regalar la leche a los vecinos, algunos harán queso, pero no hay nada claro, la gente está esperando que nada pase”, aseguró Daniel Cadavid Londoño, presidente de la Asociación de Ganaderos del Bajo Cauca, Asogauca.
Por su parte, Eudoro Bravo, director ejecutivo de la Sociedad de Agricultores y Ganaderos de Nariño, Sagán, indicó que pocos campesinos salieron a protestar, por lo que el sector lechero no sufrió afectaciones, pero al igual que Cadavid, aseguró que los productores no cuentan con un plan de contingencia en caso de bloqueos viales. (Lea: Pérdidas por más de $26 mil millones deja el paro en Nariño)
“No tenemos industria, lo único que nosotros hacemos es entregar la leche como materia prima, es decir venderla a las plantas que acopian el producto y se lo llevan para industrializarlo, ni siquiera podemos hacer queso o arequipe, entonces cuando se presentan bloqueos no podemos contar con ninguna solución”, explicó Bravo.
Finalmente, Luis Enrique Triviño Galeano, representante legal del Comité de Ganaderos del Área 5 del departamento de Cundinamarca, dijo que no se ha previsto un procedimiento que le permita a los productores evitar pérdidas económicas y productivas. “La expectativa con respecto al paro de este año es que no se alargue tanto, porque en 2013 tuvimos que actuar conforme la situación se presentaba: regalaban leche, hacían queso, entre otros, pero no queremos volver a pasar una situación como la del año pasado”.
Tiquetes aéreos retrasan la solución del paro
El pasado 28 de abril se tenía prevista desde las 8 de la mañana una reunión entre representantes de Dignidad Agropecuaria y el ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Rubén Darío Lizarralde. Pasaron 3 horas y el encuentro no iniciaba, así lo dio a conocer Óscar Gutiérrez, vocero de Dignidad Cafetera en Risaralda, quien explicó que las conversaciones iniciaron con los viceministros de Agricultura y Desarrollo Rural, Hernán Román Calderón y Aníbal Fernández de Soto, respectivamente. (Lea: “Al Gobierno hay que llevarlo a golpe de caja para que dé soluciones”, cafeteros)
“El problema de todo se debió a que la organización del Gobierno no fue la mejor, se suponía que la reunión empezaba a las 8 de la mañana y para ese entonces no había llegado toda la gente, y hasta que no estuviéramos completos no nos reuníamos”, aseguró Gutiérrez.
“Los tiquetes los teníamos para hoy (ayer) a las 9, 10 y hasta 11 de la mañana, eran las 8 y la reunión no había empezado y luego sale el Gobierno a decir que nosotros no llegábamos, cuando la culpa es de ellos, ¿por qué no se puso la reunión en la tarde?”, explicó Víctor Javier Correa Vélez, vocero nacional del movimiento por la defensa y dignidad de los cafeteros colombianos.
“Nadie dejó plantado al ministro como él lo afirmó”, indicó en un comunicado Dignidad Agropecuaria. En el documento también aseguraron que condenan las declaraciones de altos funcionarios del Gobierno que afirmaban que las protestas tenían fines políticos - electorales y rechazaron los ataques que se propiciaron por parte de la Policía en regiones como El Espinal.
“La Policía agredió arbitrariamente a manifestantes que estaban en las vías de manera pacífica, hirieron a una persona que ya fue hospitalizada y retuvieron maquinaria agrícola, además 4 personas fueron golpeadas sin razón alguna, y por tal razón, el mayor Morales, comandante del distrito, se esfumó causando descontento. La actuación de la Policía ha sido irracional”, agregó Pedro Rojas, agricultor del departamento de Tolima. (Lea: ¿Cómo creerle al Santos candidato, si el Santos presidente no cumplió?)
Hoy a partir de las 7:30 de la mañana se espera que los integrantes de Dignidad Agropecuaria y el ministro Lizarralde se reúnan con el fin de resolver temas como el programa de Protección de Ingreso al Cafetero, PIC, la materialización mediante acto administrativo del acuerdo de El Espinal con los arroceros, la siembra y comercialización de los cereales de tierra fría, la deuda bancaria y comercial de los productores, la rebaja en los insumos agropecuarios, las importaciones de alimentos y sus mecanismos de defensa, el contrabando y los Tratados de Libre Comercio.