Un estudio global encargado por la ONG de alimentación sostenible Madre Brava y realizado por Northstar Research revela que producción de carne tiene una mirada positiva frente a las personas. La encuesta, que abarcó a ciudadanos de Brasil, Francia, Alemania, el Reino Unido y los Estados Unidos, desmiente la creencia común de que la producción de carne y la ganadería son los principales culpables del cambio climático.
Contrario a lo esperado, los ciudadanos no señalan a la ganadería como la principal causa de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). La plataforma Somos Ganadería destaca que, a pesar de los persistentes señalamientos en los medios de comunicación, la percepción general no identifica a la ganadería como el principal contribuyente al cambio climático.
El estudio también revela un dato sorprendente: la producción industrial de carne tiene una huella de carbono menor que la de automóviles y aviones. Esto desafía las narrativas 'verdes' y 'animalistas' que han posicionado a la ganadería como el peor contaminante. Esta encuesta fue realizada a más de 7.000 personas, en los cinco principales mercados cárnicos.
Este sondeo reveló las razones detrás del consumo continuo de carne. Tres de cada cuatro personas en los mercados encuestados comen carne, y el 34% no desea reducir su consumo debido a la percepción de que es esencial para la salud. Otro 32% considera la carne una parte agradable de su dieta, mientras que el 17% se muestra reacio a reducir el consumo debido a su amplia disponibilidad y conveniencia. Estos resultados demuestran que, para muchos consumidores, la carne es vista como una fuente necesaria de nutrientes esenciales.
La investigación también destaca que el consumo de proteínas alternas es bajo, siendo citadas las preocupaciones sobre sabor, procesamiento y costos como principales barreras.
Otra de las grandes conclusiones del estudio tiene que ver con el costo de vida y el acceso a proteína. Los consumidores están más preocupados por el costo de la vida y por mantener el acceso a proteínas de origen animal de precio accesible y alta calidad, que por las preocupaciones ambientales o el bienestar animal.
Estos resultados, según Somos Ganadería, deberían ser un llamado a la reflexión sobre cómo dirigir las políticas futuras. Subraya la importancia de comunicar hechos claros basados en la ciencia para aumentar la conciencia de que la ganadería puede ser parte de la solución.
En efecto, a través de prácticas agroecológicas y regenerativas, la ganadería puede proporcionar alimentos de origen animal ricos en nutrientes, haciéndolos accesibles para todos sin comprometer la salud financiera y personal de los ciudadanos.