Para Rafael Mejía, presidente del gremio de gremios, este panorama es más evidente luego de los avances que ha dado a conocer el Dane a propósito del Censo Agropecuario al anunciar que hay una creciente urbanización que va en detrimento del sector agropecuario.
Durante el XLII Congreso Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite organizado por la Federación Nacional de Cultivadores de Palma, Fedepalma, el director general del Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, Mauricio Perfetti del Corral, indicó que en el país se está dando una urbanización creciente, la cual le ha restado participación al sector agropecuario.
Perfetti del Corral dijo que teniendo en cuenta el Censo Nacional Agropecuario que se lleva a cabo actualmente en el país, y al ver cifras preliminares del departamento de Atlántico, “de 34 mil predios, 6.417 se urbanizaron, con el agravante de que en municipios como Galapa 4.605 propiedades cambiaron la vocación del suelo”. (Lea: SAC: “Acá el problema no es la tierra, sino qué hacer con ella”)
Es decir, que los productores o cambian sus cultivos a otras explotaciones, o venden el predio a empresas y el dinero que obtienen se invierte en otras actividades como comercio o arriendo de locales. Así lo explicó Óscar Cubillos Pedraza, coordinador de la Oficina de Planeación de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán.
“Hay 3 factores de producción: tierra, trabajo y capital. Este último tiene rápida movilidad, hoy está acá, mañana en Estados Unidos comprando bonos del tesoro y pasado mañana en Japón en la Bolsa de Valores. El segundo es la mano de obra, si se quedó sin trabajo, lo puede conseguir en España, por ejemplo, pero es más difícil moverse porque hay unos condicionamientos de entrada. El último es la tierra, no tiene movilidad: no se puede empacar el pedazo de tierra que se tiene y llevárselo a otro lado, entonces la solución es vender, porque la actividad en el campo no es rentable”, explicó Cubillos Pedraza.
Frente a esto, Rafael Mejía López, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia, SAC, indicó que el factor que tiene en declive al campo nacional es la rentabilidad. El dirigente sostiene que las nuevas generaciones no se sienten interesadas en invertir en el campo, sino que por el contrario buscan ofertas laborales en las que puedan emplearse pensando en obtener así mejores ingresos, y que eso en parte es una responsabilidad que recae en las empresas, el Estado y los gobiernos.
“Hay ausencia de rentabilidad del sector en su conjunto. Se ha perdido el interés del campo, sobre todo por parte de los empresarios. Al campo lo ‘mató’ la politiquería y el desprecio de los gobiernos hacia lo rural. Esa situación se dio desde Carlos Lleras, con el Incora, bajo la dirección del papá de Enrique Peñalosa (quien lleva el mismo nombre), porque se trató de industrializar el país sin el desarrollo agropecuario; ahí está la reforma agraria”. (Lea: “El agro no puede seguir con política de la improvisación”: SAC)
El economista de Fedegán por su parte explica que “la urbanización entró a esas zonas (rurales) porque el agro está deteriorado y la gente no se puede morir de hambre. El Gobierno tiene claro este mensaje pero no le interesa, lo que importa es generar empleo, sin tener en cuenta en donde, y si tiene que acabar con el agro, con el fin de generar solo industria, construcción, hotelería, servicios o turismo, no le importa. Al Estado nunca le ha interesado cuidar el campo”.
Los resultados completos del Censo Agropecuario se tendrán en 2015, momento en el cual se espera que se empiecen a definir estrategias que permitan repensar el sector agropecuario de Colombia.