En un municipio español llamado Rociana del Condado, ubicado en la provincia de Huelva en Andalucía, creció Mattii, la vaca de raza frisona propiedad de Mariola, una criadora de caballos que se empeñó en entrenar a su vaca como un equino desde temprana edad, razón por la que el animal no solo actúa como un equino, sino que exige usar toda la indumentaria que llevan los caballos.
Para que se haga una idea, Matti es una vaca frisona que tiene grandes dimensiones en cuanto a tamaño, y que desde que nació, ha sido criado por Mariola. La rareza de todo esto es que su hermano cumplió la labor de bovino en el predio, pero Matti fue entrenada como un caballo, quien siempre quiso montarla, y sí que lo ha conseguido.
De acuerdo a un informe realizado por el CanalSur Más, este animal no ha producido leche en sus dos años de vida, sin embargo, tienen grandes cualidades como que pesa 500 kilogramos y mide 1.80 de altura.
“Ella tiene dos años y medio, y yo la tengo desde que tenía unos meses. Desde ese momento la cuidé y le di leche a biberón porque mi ilusión era tener una vaca. Poco a poco le fui haciendo las cosas porque no es como los caballos, que son de momento, un poco más dóciles”, describe Mariola. (Lea en CONtexto ganadero: (VIDEO) Spa de vaquitas, una idea de negocio que seduce a muchos )
El entrenamiento de Matti como caballo ha sido tal que, hasta usa protectores en sus extremidades, así como también se siente agradada por utilizar silla de montar, común en los caballos.
De acuerdo con Mariola, “desde pequeña siempre se los he puesto, pues lleva lo mismo que los caballos, lleva la montura, el cabezal igual que los caballos. Matti desde siempre, desde pequeña nunca se ha relacionado con otras vacas porque la compré muy pequeña y es melliza con un macho”.
La dueña de este animal dice que cuando son mellizos, las vacas no suelen ser productivas, razón por la que las venden. Esta fue la razón por la que Mariola decidió comprarla y darle un trato especial a este peculiar animal.
“Siempre la he criado con caballos y por eso es como uno más. Al principio, los caballos se asustaban un montón, pero ya es parte de ellos”, dice la dueña.
Un punto a destacar en este animal es que, así como los equinos, Matti también aprendió a trotar y a galopar, lo cual deja, como se dice coloquialmente, ‘con la boca abierta’ a quienes conocen su fascinante historia.
En el informe presentado en dicho medio, la presentadora tuvo la oportunidad de montar a este animal, lo cual demuestra su docilidad y buen entrenamiento.