En un artículo de Patricia Jazo, de la Feria Internacional Agropecuaria de América Latina (FIGAP), la cría de animales con inteligencia artificial revoluciona la agricultura y la ganadería, transformando la interacción con el mundo animal.

Según la autora, la unión entre la IA y la cría de animales promete cambiar la forma en que alimentamos al mundo y cuidar al reino animal. Su artículo explora cómo la inteligencia artificial modela el futuro de la cría de animales, generando transformaciones en diversas dimensiones de la vida cotidiana.

Mejorando las prácticas de alimentación y reproducción del ganado con IA

La agricultura sostenible ha experimentado un cambio transformador gracias a la integración de la inteligencia artificial. Los agricultores ahora pueden aprovechar la tecnología de punta para mejorar sus cultivos, reducir pérdidas y trabajar de manera más eficiente. (Lea en CONtexto ganadero: La inteligencia artificial al servicio de la agricultura)

La IA permite a los agricultores obtener información detallada sobre sus cultivos al analizar la calidad del suelo, patrones climáticos y presencia de plagas. Esta información informada les permite tomar decisiones estratégicas, desde cuándo plantar hasta cómo cosechar, mejorando la eficiencia y la calidad de las cosechas.

La automatización también juega un papel crucial. La IA puede encargarse de tareas como el monitoreo de la salud de los cultivos y la administración del riego, reduciendo el trabajo manual y aumentando la eficiencia general. Además, la detección temprana de alimentos en proceso de deterioro mediante sensores ayuda a minimizar el desperdicio alimentario y a optimizar la producción.

En resumen, la inteligencia artificial se ha convertido en una herramienta esencial para la agricultura sostenible, permitiendo a los agricultores tomar decisiones más informadas, reducir pérdidas y mejorar la eficiencia en la producción de alimentos.

Aplicación de la IA en la cría de pollos y camarones

Un ejemplo destacado de la implementación de la IA en la cría de animales es el proyecto piloto realizado en la granja de investigación de Oceanloop en Alemania en 2022.

Otro proyecto utilizó un teléfono inteligente sumergido en el agua para capturar imágenes de camarones a intervalos regulares. Estos datos se enviaron en tiempo real a una computadora cercana, donde algoritmos de IA analizaron la información para mejorar las prácticas de cría.

El monitoreo continuo del crecimiento de los camarones permitió una respuesta rápida ante posibles problemas, destacando la importancia de esta tecnología en la cría de animales propensos a complicaciones. El desarrollo de algoritmos inteligentes ofrece un potencial transformador, cambiando no solo la cría de camarones, sino también la perspectiva de negocios en su conjunto.

El objetivo final es la digitalización y modernización completa de la cría de camarones, buscando la colaboración con otros sectores para lograr una cría más sostenible y ética. (Lea en CONtexto ganadero: Por qué usar inteligencia artificial en su finca)

Beneficios innegables y desafíos éticos

La cría de animales con inteligencia artificial promete un futuro más sostenible, eficiente y compasivo. La capacidad de utilizar algoritmos y datos para mejorar la genética, el bienestar y la productividad de los animales representa una perspectiva emocionante. Esto no solo impulsa la producción de alimentos de alta calidad, sino que también reduce el desperdicio, optimiza los recursos y disminuye el impacto ambiental.

Sin embargo, es crucial abordar estos avances con responsabilidad y ética. El bienestar de los animales debe ser una prioridad, asegurando el cumplimiento de normativas y regulaciones pertinentes. Además, se deben establecer protocolos para garantizar que la inteligencia artificial en la cría de animales sea aplicada de manera ética y sostenible.

En última instancia, la combinación de inteligencia artificial y cría de animales es un ejemplo impresionante de cómo la tecnología puede contribuir al progreso humano y al cuidado del medio ambiente. Si se desarrolla de manera adecuada y ética, esta tendencia tiene el potencial de revolucionar positivamente la forma en que interactuamos con el mundo animal y cómo alimentamos a una población mundial en constante crecimiento.