Así quedó confirmado luego de las elecciones que para elegir a los representantes tuvieron lugar en días pasados en Paipa.    Hablamos con Guillermo Naar, presidente de la junta directiva de la Fundación Colombia Ganadera, Fundagán, entidad que fue reelegida por las víctimas para que por un nuevo periodo de 2 años siga velando por sus intereses y ayudando a la reconstrucción del tejido social del país en la Mesa Nacional de Víctimas.   Naar habló sobre el trabajo que le permitió a la Fundación ser elegida nuevamente para tener un puesto en la Mesa, sobre los programas que con éxito se han venido y desarrollando e incluso sobre lo que de cara al proceso de paz se ha gestado.   ¿Qué es la Mesa Nacional de Víctimas?   En el marco de la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras (Ley 1448 de 2011) existe un capítulo que habla de su participación y de sus representantes. Entre los mecanismos de participación que la ley consagra están las mesas municipales, departamentales y una Mesa Nacional de Participación de Víctimas. En esta última existe la posibilidad de interactuar con el Gobierno Nacional y su política pública orientada a la atención y defensa de los derechos de las víctimas. (Informe: Así se multiplica la economía rural con una vaca)

Hace 4 años hubo una mesa transitoria de víctimas en Bogotá, de la cual Fundagán hizo parte. Y la primera Mesa Nacional se conformó hace 2 años, siendo este el período por el cual son elegidos sus miembros. Vencidos estos 2 años, se convocaron nuevas elecciones que se llevaron a cabo el pasado  9 de junio, en las cuales fue ratificado el voto de confianza para seguir siendo parte de dicha Mesa.   ¿Quién hace esa convocatoria?   La hacen la Unidad de Víctimas y la Defensoría del Pueblo. Esta tuvo lugar en Paipa del 8 al 10 de junio.   ¿Quiénes participan en el proceso de selección?   Van todas las personas que han sido elegidas previamente a nivel regional para participar a nivel departamental. Esto se da porque las víctimas individuales deben surtir un proceso que consiste en inscribirse previamente a nivel municipal, luego departamental y desde ahí enviar sus delegados a la elección nacional.​   En esta oportunidad participaron 300 representantes de 1.023 mesas a nivel nacional, a los que se suman las organizaciones defensoras de los derechos de las víctimas, entre las que se encuentra Fundagán. (Lea: Fundagán recibe reconocimiento de la Unidad de Víctimas)   ¿Cómo es el proceso de elección?   Hay personas que son víctimas y se han asociado con otras en su misma condición, a quienes los instalan en unas mesas de trabajo de acuerdo con el hecho victimizante del que han sido objeto; hay otras, a las que por su condición de vulnerabilidad, se les da un trato diferente, entre ellas están los adolescentes, personas de la tercera edad y de la comunidad LGBTI. Ellos en cada mesa eligen un representante que será candidato a participar en la Mesa Nacional. ​   Posteriormente, esos representantes se reúnen en un salón de eventos en el que ya entran a participar las organizaciones defensoras de los derechos de las víctimas (ODV). Allí, cada una expone en plenaria los argumentos por los que considera debería ser parte de la Mesa Nacional. En el caso de Fundagán, se hizo una presentación de lo que ha sido su trabajo de acompañamiento y apoyo a dicha Mesa, desde su creación, y las que han sido las contribuciones misionales de Fundagán en favor de las víctimas ganaderas de la violencia, como un aporte al logro de los objetivos de la Ley de Víctimas expedida en 2011.   Una vez todas las entidades han expuesto sus argumentos se procede votar. Es un procedimiento totalmente reglado y avalado por la Registraduría Nacional del Estado Civil. Al final se hace el escrutinio y se define el nombre de las ODV que hacen parte de la Mesa Nacional de Víctimas. (Lea: Las víctimas ganaderas encontraron en Fundagán el mejor aliado)   ¿Cuántas personas y/o entidades conforman la Mesa Nacional de Víctimas?   La norma reglamentaria dice que pueden haber hasta 8 cupos para las ODV, los cuales son asignados a quienes obtengan las votaciones más elevadas en el proceso.   ¿Cuáles fueron las que se quedaron con los cupos para este nuevo periodo de 2 años?  

Fueron en total 6: La fundación Asomujer, que obtuvo el mayor número de votos, seguido por Fundagán, que repite escaño; en tercer lugar se ubicó el Círculo de Estudios Culturales y Políticos. (Lea: Fundagán lanza portal para atender a víctimas del conflicto)

Los otros puestos fueron para la asociación Colombia Soy Yo, la Campaña Colombiana contra las Minas y la organización de Autoridades Tradicionales Indígenas.   ¿Cuándo inician los trabajos de este nuevo grupo?   Ya comenzaron, de hecho la primera sesión de trabajo fue el pasado miércoles 10 de junio allá en Paipa y la Mesa se reúne cada 2 meses, aproximadamente. A esas sesiones acuden funcionarios del Gobierno, para que expliquen, por ejemplo, el programa que quedó establecido en el Plan Nacional de Desarrollo para las víctimas. La agenda de temas que se van tratando depende de los funcionarios y las instituciones gubernamentales que participan en las sesiones de la Mesa.   ¿Cuáles han sido los logros más destacados de Fundagán?

Tanto los programas de mejoramiento de calidad de vida de las familias rurales vulnerables y generación de ingresos sostenibles, como el de visibilización y apoyo a las víctimas ganaderas de la violencia, tienen como objetivo final el de ayudar a reconstruir el tejido social rural, fuertemente deteriorado por décadas de violencia y abandono.

En cuanto a los temas específicos que se tratan en la Mesa de Víctimas, Fundagán tiene como objetivo seguir siendo parte integral de las respuestas que se le deben a quienes conforman nuestro entorno rural y que lo han perdido todo por culpa de un conflicto que se extiende ya por más de 50 años.

Solo por mencionar algunos resultados, Fundagán ha logrado la reparación de 1.108 víctimas ganaderas de la violencia en el marco de la reparación por vía administrativa que contempla la Ley de Víctimas y Restitución de Tierras.   

En 8 sesiones de la Mesa Nacional, se brindó apoyo técnico e institucional para la comprensión de las propuestas de políticas públicas que presenta el Gobierno en materia de reparación integral a las víctimas.

Adicionalmente, se ayudó en la construcción de documentos, planes, programas y proyectos propositivos de la Mesa hacia las instituciones que conforman el Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral a las Víctimas. (Lea: Víctimas de las Farc constituyen su propia Federación)   En Paipa fueron muchas las personas que hablaron del PAVIC y del programa Una vaca por la paz, ¿a qué lo atribuye?  

El Programa de Atención a las Víctimas Ganaderas de la Violencia, PAVIC, ha tratado de estar presente en todos los rincones de Colombia. 

Su gratuidad, la calidad del apoyo que se brinda a las víctimas y la garantía y respaldo que ofrece el trabajo que se ha hecho desde su gestación, le han permitido a Fundagán convertirse en referente de una defensa seria y propositiva de los derechos de las víctimas ganaderas, quienes reconocen luego de este acompañamiento que denunciar vale la pena, que es necesario y que es el comienzo de un proceso que brinda la posibilidad de acabar con el olvido y la impunidad. (Lea: Ganaderos le tienden la mano a víctimas de minas antipersonal)

Por su parte, Una Vaca por la Paz es sinónimo de bienestar, de segundas oportunidades, de nutrición, de alegría, de multiplicación, todo gracias a la generosidad de personas y empresas conscientes de que con una vaca preñada y el acompañamiento técnico del Fondo Nacional del Ganado, se pueden cambiar las vidas muchas familias vulnerables del campo. Ya son 2.500 familias afectadas por la pobreza, la violencia y el desplazamiento rural que a partir de la donación de una vaca preñada, construyen un nuevo proyecto de vida de manera sostenible y con gran impacto no solo para su bienestar, sino para aclimatar la paz y la convivencia en el campo.

Una reciente encuesta entre beneficiarios del programa ‘Una Vaca por la Paz’ evidenció que quienes recibieron los animales lograron mejorar su economía en un 90,66 % y su nutrición en un 86,51 %.   ¿Cuáles han sido los aportes al proceso de paz por parte de Fundagán?

En primer lugar, el PAVIC que ya mencionamos y 2 sendos trabajos de investigación sobre las víctimas ganaderas (Acabar con el Olvido, primero y segundo informe), donde se consigna la tragedia sufrida por miles de víctimas de este sector, con el fin de dejar una memoria histórica que evite que sus nombres y sus situaciones particulares sean olvidados.

En segundo lugar, Fundagán participó activamente en los foros organizados en 2014 por la ONU y la Universidad Nacional, a instancias de la mesa de negociación de La Habana. Fueron espacios donde se visibilizó la magnitud de la victimización ganadera en el marco de la aún vigente violencia rural. 

Como consecuencia de ello, la ONU incluyó a  Ximena Ochoa, ganadera huilense víctima de las Farc y beneficiaria del PAVIC de Fundagán, dentro de la delegación de víctimas que estuvieron en La Habana exponiendo sus casos ante los negociadores del proceso de paz.

Suena cliché pero es inevitable preguntarle ¿qué viene para Fundagán?

Trabajar como lo ha venido haciendo. Sabemos que lo que se ha hecho es apenas la cuota inicial de lo que nos hemos impuesto como compromiso con quienes a diario confían en la Fundación.

Este es un trabajo que no da respiro, en el que no hay pausas y en el que están puestas las esperanzas de quienes han resultado víctimas, pero también las nuestras, que sabemos que podemos hacer algo para devolverles a ellos la esperanza de un mejor futuro.