Los productores de esta zona de Nariño han sido evacuados y llevados hasta las cabeceras municipales de Cumbal y Guachucal en búsqueda de refugio. Muchos han llevado consigo sus reses, por lo que en la región se teme por un eventual desabastecimiento de forraje y pasturas.

La reactivación de los volcanes Chiles y Cerro Negro, al sur de Nariño, tiene seriamente alarmada a la población que reside en las laderas de la zona, quienes han venido siendo evacuados a lugares más seguros tras las recientes actividades sísmicas que se han registrado. (Lea: Los sismos sí tienen efectos sobre el ganado)

En la zona habitan principalmente indígenas y campesinos que se dedican a la ganadería, los cuales ante el temor de que haya una erupción se han ido con sus pertenencias y sus animales hacia los cascos urbanos de Cumbal y Guachucal.

La actividad volcánica de estos días hizo que se decretara la alerta naranja con el fin de coordinar actividades en favor de proteger a las 3.582 familias pertenecientes a los resguardos indígenas de Chiles, Panam y Mayasquer, según datos revelados por la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, Ungrd. (Lea: Tormentas eléctricas afectan labores ganaderas en Magdalena)

"El pronóstico que nos da el Servicio Geológico es que por el cambio de amarillo a naranja hay probabilidades de erupción en términos de días y semanas", dijo en rueda de prensa Carlos Iván Márquez, director de la Ungrd.

Esta situación ha generado zozobra entre los ganaderos ubicados en los municipios aledaños, quienes ven como una amenaza la llegada de sus colegas, ya que como consecuencia del verano que ha azotado al departamento en las últimas semanas, es posible que se acaben muy rápido el forraje y las pasturas que hay disponibles en este momento. (Lea: Los rayos siguen matando ganado en Colombia)

Álvaro Buchelli Herrera, un productor ubicado en Guachucal, en diálogo con CONtexto Ganadero, le pidió a la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, que mantenga el programa de suplementación bovina, ya que gracias a él los empresarios tienen la posibilidad de abastecerse de comida suficiente para sus animales de cara a momentos de escasez como el que se puede presentar en su municipio ante la llegada de más animales.

“En este momento no ha llovido, la hierba que tenemos es muy poca, por lo que sería bueno que Fedegán y el Ministerio de Agricultura mantengan vigente ese proyecto, que podría ser muy necesario de presentarse una erupción volcánica en esa región del departamento”, expuso Buchelli Herrera. (Lea: Aprenda a cuidar su hato de los efectos de los vendavales)

No obstante, ese no es el único temor que está generando entre el sector ganadero la reactivación de los volcanes Chiles y Cerro Negro, el segundo ciclo de vacunación contra la fiebre aftosa, que inició el pasado lunes, también podría verse afectado por la salida de los ganaderos de sus microfundios.

Álvaro Arturo Chaves, coordinador de la Unidad Regional de Desarrollo Ganadero, Urdg, de Fedegán para Nariño, señaló que hay sospechas de que se van a dar movilizaciones, todas ellas hacia el casco urbano, que podrían retrasar el normal desarrollo de la aplicación de los biológicos en esa zona del departamento. (Lea: Desarrollan método para predecir inundaciones)

“En una reunión que tuvimos con la oficina del ICA (Instituto Colombiano Agropecuario) regional Nariño, se tocó ese tema y acordamos que vamos a esperar a que los vacunadores entren a campo y si ellos nos comunican que hay problemas, que no hay gente o que incluso no se puede vacunar, ya se tomarán las decisiones pertinentes, pero ante todo queremos ser prudentes para evitar equivocarnos”, remató Arturo Chaves.