A diferencia de otras regiones que se están viendo afectadas por las fuertes lluvias, esta zona del departamento de Santander está empezando a sufrir con el verano propio de la época. Los ganaderos esperan cualquier tipo de ayuda o alimentos subsidiados.   El régimen de lluvias ha tenido una sensible disminución. A medida que las altas temperaturas aumentan la situación se hace más compleja pues la oferta de comida y de agua para los bovinos cae considerablemente. (Lea 5 pecados que cometen los ganaderos en época de verano)   Carlos Andrés Pinilla Galvis, presidente del Comité de Ganaderos la Hoya del Río Suárez, Socorro, señaló que "generalmente" cada año el verano se empieza a sentir a finales de enero.   Indicó que en la zona de Socorro, San Gil, Galán, Cabrera y Palmar, han caído lluvias de aproximadamente 7 mililitros, lo cual es poco, mientras que en municipios como Oiba, Guadalupe, Contratación, Chima y Guacamayo, en donde las precipitaciones se presentan con mayor frecuencia, han sido de entre 30 y 40 mililitros.   "Si las cosas siguen así y para marzo no caen unas buenas lluvias, la situación por cuenta del verano se va a complicar", aseveró. (Lea: Sea recursivo para alimentar a los semovientes en temporadas de verano)   Por su parte José Javier Aguilar, médico veterinario y miembro del sector ganadero de la región explicó que algunos productores ya se están empezando a preocupar porque a pesar de que han experimentado pocos días de verano, estos han sido intensos.   De acuerdo con Aguilar, en los últimas días el sol ha sido inclemente, las temperaturas han aumentado, los pastos se están empezando a secar y el agua a escasear.   Dijo que últimamente no han recibido ningún tipo de ayuda, razón por la que los ganaderos solicitan a las entidades gubernamentales apoyo para alimentar a sus semovientes bien sea con concentrado, heno o silo. (Lea: Recomendaciones para trabajar con condiciones climáticas variables)   "Con el verano los animales van perdiendo peso porque la oferta forrajera se va reduciendo y por ende la producción de leche y carne se ve afectada", comentó.   El médico veterinario señaló que en algunas zonas se están empezando a preparar para cuando el verano se intensifique, e inclusive están racionado agua hasta para el consumo humano.   Las recomendaciones para los ganaderos son: en la medida de lo posible almacenar agua, descartar los animales menos productivos para bajar la carga de las fincas, y utilizar los recursos que tengan de manera razonable, como por ejemplo caña o pasto de corte. (Lea: La descarga animal es la solución para tener buenos pastos)