Habitantes de por lo menos 3 departamentos en Colombia piden la creación de bases militares para impedir que miembros de grupos insurgentes se apoderen nuevamente de dichos territorios. La respuesta aún no llega.
El temor por las Farc vuelve a ser el común denominador de las zonas rurales del país. Municipios como Socha, en Boyacá; Anolaima, en Cundinamarca; y Yondó, en Antioquia; están abandonados por parte del Ejército Nacional, lo que repercute en una presencia paulatina pero cada vez mayor de integrantes de grupos al margen de la ley.
Lo más preocupante del tema es que estas 3 localidades del territorio nacional han sido azotadas históricamente por el grupo armado, lo que ha generado temor y desconfianza por parte de los pobladores hacia las Fuerzas Militares, a quienes señalan por abandonarlas a merced de grupos terroristas. (Lea:¿Por qué al Ejército? ¿Por qué ahora?)
Socha, sin base militar
De acuerdo con Luis Jaime Agudelo Cristancho, alcalde de Socha, la base militar del municipio boyacense está desolada por el abandono de los soldados del Ejército, quienes custodiaban esta zona de la provincia de Valderrama.
“Hace algún tiempo las Farc hicieron explotar un carro bomba, lo cual hace que el miedo que se tiene porque ese grupo subversivo regrese esté latente entre nuestra población. Hace un mes y medio que los soldados no están allí”, aseveró Agudelo Cristancho. (Lea: “Estamos ante un ejército diezmado": procurador Ordóñez)
Desde el ente gubernamental le comunicaron al Ejército y al Ministerio de Defensa la situación, pero se concluyó que la unidad militar se vio forzada a marcharse pues el predio en el que se encontraba no era propiedad de la cartera de Defensa.
“Se están adelantando gestiones tendientes desde la Alcaldía para normalizar esta situación”, señaló el mandatario de Socha.
Anolaima con temor por retorno de las Farc
En el municipio de Anolaima, ubicado en la Provincia del Tequendama, a 71km de Bogotá, la sensación de temor es igual o mayor que en Socha. De acuerdo con Osmán Soto, alcalde de la región cundinamarquesa, en la zona cada vez es más latente el rumor de un posible retorno de las Farc.
“En nuestro municipios fuimos azotados por el frente 42 de las Farc. Durante la administración de Álvaro Uribe se brindó un gran apoyo con la política de seguridad democrática. Pero actualmente se ha bajado la guardia”, acotó Soto. (Lea: Fedegán, Policía y Ejército se unen para combatir delitos)
Aunque el Ejército Nacional ha continuado sus recorridos en la zona, no lo hace con la misma frecuencia con que lo hacía en los años anteriores, lo que viene afectando no solo a Anolaima, sino también a los municipios de Quipile y Cachipay.
“Las tropas del Ejército se limitan a hacer un recorrido en este territorio, pero no con la misma frecuencia que antes ni con el mismo número de soldados. Por eso venimos pidiendo que se instale una base militar”, sostuvó el alcalde de Anolaima.
En Yondó se piden ayudas, pero no llegan
Yondó, municipio localizado en la subregión del Magdalena Medio, en el departamento de Antioquia, también está pidiendo a gritos la instalación de una base militar para controlar la seguridad en la zona.
De acuerdo con un ganadero de la región, que prefirió dejar su nombre en el anonimato, esta región del país ha estado abandonada por parte del Ejército Nacional, de allí la urgencia de contar con la instalación militar. (Lea: Atentado contra ganadero en Cauca refleja inseguridad regional)
“Los ganaderos en la región hemos dicho que donamos hectáreas de nuestro predios para la construcción de un batallón, pero aún no se ha tenido respuesta positiva”, culminó el productor pecuario.
La responsabilidad es de la Policía, no del Ejército
Pero aunque las peticiones de las bases militares son recuerrentes y muchos de los espacios para su creación ya están, la instalación no parece ser una prioridad del Gobierno, razón por la que el miedo se apodera con más fuerza de sus habitantes. ¿Por qué pasa esto?
El coronel retirado de las Fuerzas Armadas, Carlos Alfonso Velásquez, quien se desempeñó como comandante del Bloque de Búsqueda contra las organizaciones del narcotráfico, explicó que la entidad encargada de la seguridad en los pueblos debe ser la Policía Nacional, y no el Ejército. (Lea: Ganaderos de Puerto Berrío siguen asustados por la inseguridad)
“Las seguridad de las zonas de la poblaciones es eminentemente función misional de la Policía Nacional, que es la llamada a ser control permanente en estos sitios. El Ejército, por su naturaleza, es móvil. Muy pocas veces se puede decir que soldados del Ejército están permanentemente en un pueblo”, apuntó el también docente de la Universidad de la Sabana.
Aunque este medio intentó conversar con algún funcionario de la Policía Nacional y del Ejército para conocer su posición y el porqué nos e aumenta su presencia en estas zonas del país, nadie en las instituciones quiso hablar del tema.