La Empresa Colombiana de Productos Veterinarios, Vecol, dictó una charla a ganaderos y empleados de finca sobre el plan sanitario que se debe estructurar en cada predio. El encuentro se desarrolló en el municipio de Tierralta, Córdoba.   Los 30 asistentes al encuentro aprendieron que la ganadería eficiente es mucho más que tener un número elevado de animales. De nada sirve decir disponer de hatos grandes si los ejemplares no pasan por las manos de un médico veterinario que verifique su estado de salud y se les aplican vacunas contra patologías de control oficial y no oficial.   Luis Arturo Silgado, profesional en Valencia de Gestión Pproductiva y Salud Animal del Fondo Nacional del Ganado FNG, administrado por Fedegán, señaló que “el experto de Vecol les explicó a los ganaderos la forma de estructurar de un plan sanitario para sus fincas, con el fin de  prevenir enfermedades que puedan afectar los hatos bovinos”. (Lea: Vecol comercializa vacuna Startvac contra la mastitis bovina)   Silgado manifestó que el plan sanitario se crea para prevenir enfermedades antes que curarlas, con lo que se reducen costos, mientras que la curación de patologías compromete la salud y productividad del animal y a la vez se corren riesgos de transmitirla a otras reses. “Desde el Fondo les hablamos a los productores de estos temas. Los planes sanitarios deben ser preventivos y no curativos”, recalcó.   Gustavo Daniel Negrete, ganadero y programador en el Ciclo de Vacunación contra la aftosa, asistió a la charla en la que reforzó los conocimientos que ha adquirido y que pone en práctica en su predio.   Como programador en el Ciclo de Vacunación consideró que Colombia debe mantener su estatus como país libre de fiebre aftosa y los ganaderos están en la obligación de aplicar los inmunológicos, sobre todo si se tiene en cuenta que Venezuela es una región endémica y fronteriza. (Lea:La estomatitis toca las puertas de ganaderías en Bolívar)   Para Negrete, los ganaderos tampoco se pueden olvidar de incluir en su plan sanitario la aplicación de vacunas contra la brucelosis y tuberculosis. El profesional del Fondo añadió que cada productor debe analizar qué tipo de enfermedades afectan a los semovientes según la zona donde se encuentren y, con base en eso, se decide la aplicación de otros inmunológicos. En la costa, se recomienda vacunar contra los clostridiales.   Sin embargo, mencionó Silgado, casi todas las fincas en la Costa se olvidan de llevar los registros del plan sanitario. A pesar de ello, en la actualidad ya hay varios predios tecnificados y que valoran las Buenas Prácticas Ganaderas, BPG, lo que les permite preservar la salud de sus reses.