El centro de faenado fue certificado por el Invima hace 3 años con el propósito de convertirlo en exportador de carne, pero el aumento del delito obligó a su cierre, perjudicando a 150 familias que dependían económicamente de su funcionamiento.
El sacrificio clandestino sigue perjudicando los intereses del sector ganadero, su víctima más reciente fue el Frigorífico Fogasa. El centro de faenado bovino, que pertenece al Fondo Ganadero de Santander, tuvo que ser cerrado por los bajos niveles de beneficio registrados, los cuales provocaron que su sostenimiento fuera imposible. (Lea: Antioquia no quiere ceder terreno al abigeato)
La planta, que venía operando desde hace varios años, fue certificada hace 3 años por el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, Invima, como un frigorífico clase 1, es decir, que se le reconocía como lugar apto para la distribución de productos para el consumo local, nacional y de exportación.
Óscar Ortiz Agudelo, profesional de Gestión Productiva y Salud Animal de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, en el proyecto local ubicado en Aguachica, aseguró que uno de los propósitos de la construcción de la planta era la exportación de carne hacia Venezuela y de paso atender la demanda del producto en ciudades aledañas como Santa Marta, Barranquilla y Cartagena. (Lea: Nadie responde por calidad de carne que se consume en Casanare)
“Esa situación se veía venir desde diciembre del año pasado. El bajo volumen de beneficio no permitía que hubiera un equilibrio para sostener la producción, además el disparado sacrificio clandestino que hay en la zona, hizo que la junta directiva tomara la determinación de clausurar el lugar”, reseñó Ortiz Agudelo.
Debido al cierre del frigorífico, este diario consultó con el Área de Recaudos y Cartera del Fondo Nacional del Ganado, FNG, quienes dieron a conocer el reporte del año 2014 en el que la caída en el beneficio de ganado es notoria. En enero de 2014 se estaban sacrificando 5.642 bovinos al mes, cifra que disminuyó a 3.418 en febrero, a 1.426 en marzo, hasta alcanzar un mínimo de 694 en abril. Es decir en los primeros 4 meses de 2014 hubo una reducción en el beneficio de más de 11 mil reses.
El último pago de la cuota de fomento ganadero que se recibió data de septiembre de 2014, mes en el que fueron beneficiados 1.218 bovinos.
CONtexto Ganadero quiso hablar con Mariela Dulcey, administradora de Fogasa, con el propósito de conocer las razones por las que fue cerrado el lugar y si hay una posibilidad de que sea reabierto, pero Dulcey adujo problemas personales y evitó contestar. (Lea: Preocupación por bajo recaudo de la Cuota de Fomento en Huila)
Como consecuencia del cierre, cerca de 150 familias que dependían de forma directa e indirecta de Fogasa, perdieron su fuente de empleo e ingresos.