La contraloría del departamento asegura que la contratación se adelantó con presuntas irregularidades, por su parte, las empresas encargadas de las obras argumentan que todo está ejecutado.

La primera semana del mes de marzo, la Contraloría de Santander, en cabeza de Argemiro Castro Granados, desveló que en el departamento se dio un mal manejo de los recursos que por $7.000 millones se destinaron en 2010 para diferentes programas de mejoramiento de vivienda rural en 20 de los 87 municipios de la región santandereana.

El funcionario aseguró que 4 contratistas que desarrollaban las obras, les entregaron a los labriegos beneficiados ladrillos, bloques, cementos y tejas en lugar de efectuar las obras de arreglo de las viviendas. (Lea: La prioridad es que exista tierra, vivienda y producción)

“Como en muchas partes se entregaron materiales, tenemos que realizar un avalúo de estos para saber cuánto valdrían, con esto podríamos determinar el daño fiscal, para nuestro caso, y la acción penal, para la Fiscalía”, explicó Castro Granados.

Asimismo, el contralor departamental añadió que en los contratos firmados que aún estén en ejecución y que tengan irregularidades, no serán canceladas en su totalidad, por tratarse de obras a medio término.

“Ya se detectó que se están entregando materiales y que en algunas obras realizadas se tenían problemas de calidad. Ahora nos toca hacer cuantificación del daño para dar el veredicto final. Esto tardará un mes y medio, pues es necesario hacer el avalúo casa por casa”, apuntó Argemiro Castro Granados.

Una de las firmas contratistas se defiende

Una de las firmas más nombradas dentro de este proceso es M.P. Ingeniería, a la cual se le acusa de ser responsable de varios proyectos inconclusos. CONtexto Ganadero habló con Hebert Parada Carreño, representante legal de la firma, para esclarecer los hechos. (Lea: Abecé para adquirir una vivienda de interés social rural)

De acuerdo con Parada Carreño, la firma maneja 13 proyectos en la misma cantidad de municipios y todos se han cumplido a cabalidad de acuerdo con lo pactado al comienzo de la ejecución del programa.  

“El señor contralor está errado o sus empleados le están dando mal la información. Nosotros tenemos un histórico de todos los proyectos que se hicieron”, aseveró el representante legal de M.P. Ingeniería.

De igual forma, el funcionario de la firma explica que los proyectos de vivienda que se lleven a cabo en el país deben de estar firmados, al final de la obra, por cinco supervisores que darán la vía libre para la aceptación del proceso. (Lea: Gobierno beneficiará a 100 mil familias rurales con vivienda propia en 2013)

“Si esto no existe, la obra nunca será recibida. Son muchos controles los que existen para que el contralor de una manera irresponsable diga que las obras se están haciendo a mansalva y con irregularidad”, terminó Hebert Parada Carreño.

Martha Lucía Calderón, personera del Valle de San José, uno de los municipios donde M.P. Ingeniería llevó a cabo uno de sus proyectos, argumentó que el programa en esta zona del Santander estaba diseñado para construir 50 viviendas rurales.

“Este proyecto inició en 2011 en la administración pasada, pero ya se cumplió totalmente. La firma sí cumplió con lo establecido en el tema de viviendas rurales. Desde 2011 hasta 2013 fue una lucha para lograr la entrega final de las casas, pero se entregaron”, añadió Calderón.