De acuerdo con los ganaderos de municipios como Toro, las pasteurizadoras han mantenido el pago del lácteo a la baja en los últimos meses, mientras que los costos de producción siguen subiendo. Aun así, tienen buenas expectativas para este año.   Luz María Castrillón, representante legal de la Cooperativa de Ganaderos Lecheros de Toro, Coganalector, contó que tras las intensas lluvias de diciembre y comienzos de enero, las nubes han cedido para dar paso a la luz solar.   Sin lugar a dudas, este cambio resulta beneficioso para los productores, sobre todo porque en diciembre tuvieron graves complicaciones por las anegaciones en potreros y daños en vías. (Lea: Importaciones de lácteos en octubre se acercaron a las 38 mil toneladas)   No obstante, el precio de la leche, mantenido a la baja por las pasteurizadoras, continúa siendo un inconveniente para aquellos que le están apostando a incrementar sus ingresos. Mientras que con el inicio del 2018 los insumos y los salarios subieron, el pago del lácteo se mantuvo igual.   “El negocio está terrible, la siguen pagando a $1.000, a otros, $900. Eso varía de acuerdo a la calidad, que se ha afectado por los aguaceros. Aunque hay queseras que pagan un mejor valor, entonces obviamente muchos se van con ellas”, explicó Castrillón.    La dirigente gremial explicó que desde la segunda mitad del año pasado, la empresa les empezó a disminuir el precio de forma paulatina, llegando a $30 por litro en una ocasión. (Lea: Ganaderos en Valle del Cauca tendrán bajo precio de leche durante el verano)   “El mes pasado nos bajaron $5. Ellos no lo bajan de una, sino que lo van haciendo gradualmente. Nosotros teníamos el litro a $1.050, el problema es que con las importaciones de leche en polvo y la falta de ayuda del Gobierno, nos han reducido el pago”, señaló.   Lo mismo contó Luisa Rubiano, directora ejecutiva de la Asociación de Ganaderos del municipio de Bolívar, Valle del Cauca, Asoganabol, quien confirmó que en los últimos meses de 2017 no habían recibido ningún alza. (Lea: Ganaderos de Toro se sienten olvidados por el Gobierno)   Ante esta situación, los centros de acopio han tenido que destinar sus ingresos para pagar al productor, en detrimento de las posibles inversiones que podrían haber hecho con un pequeño cobro adicional, o sacrificando incluso su misma estabilidad financiera.   “Nosotros cobramos $10 de aporte y $10 de administración, que son devueltos en el momento en que el afiliado se retire. Pero hemos tenido que utilizar parte de esos aportes para sostenernos”, confesó la representante de Coganalector.   Por lo pronto, a los ganaderos solamente les queda esperar el ajuste que decreta el Gobierno en marzo de cada año, pero como van las cosas, no será mucho el incremento tras las sucesivas disminuciones del pago.