Mientras que el Gobierno Nacional estudia la declaración de emergencia económica y social en el departamento, sus habitantes se sienten desamparados por la falta de un gobierno estable. Hay temor porque importantes proyectos se están quedando estancados. En 2016, La Guajira tuvo 3 mandatarios departamentales, 2 por elección popular y uno designado por el Gobierno central. En noviembre del año anterior, Oneida Pinto Pérez fue elegida como gobernadora para el período 2016-2019. (Lea: Ganaderos de La Guajira están preocupados por crisis en Gobernación) Sin embargo, no alcanzó a cumplir 6 meses en el cargo cuando el Consejo de Estado declaró nula su elección. En su lugar, el presidente Juan Manuel Santos designó al superintendente de Notariado y Registro, Jorge Enrique Vélez, como gobernador encargado mientras se convocan nuevas elecciones. Finalmente, en noviembre de 2016, Wilmer González Brito fue elegido como gobernador en unas elecciones atípicas empañadas por presuntos hechos de corrupción. No pasaron 3 meses desde la posesión de González, cuando la Fiscalía General de la Nación imputó cargos por delitos de cohecho y fraude electoral. A esto se suma la captura del alcalde de Riohacha, Fabio Velásquez Rivadeneira, quien fue privado de la libertad por irregularidades en un contrato de alimentación escolar. Esta situación ha sido angustiosa para los productores de la región, que no han podido avanzar en sus proyectos por la falta de un mandatario departamental. (Lea: 2016 fue otro año fatídico para ganadería de La Guajira) José Ramón Molina, gerente de la Cooperativa Multiactiva Agropecuaria e Industrial de La Guajira, Cooajira, declaró que estos hechos han provocado “inestabilidad” en todos los sectores, incluido el agropecuario. “Este tema genera perjuicios en las instituciones. El gremio de ganaderos y agricultores sentimos la poca seguridad que existe con las medidas que toma el Gobierno Nacional frente a la problemática del departamento”, señaló. Para el dirigente gremial, existe un grave problema estructural e institucional, pues las normas establecidas en la Constitución y las leyes son muy “laxas”, porque permiten que personas inhabilitadas se puedan inscribir en cargos de elección popular. Molina denunció que el Ejecutivo no ha contribuido a satisfacer las necesidades de la población entre las que se destacan la falta de agua y de alimentos, algo que también afecta al sector pecuario y agrícola. En este sentido, le preocupa que proyectos de extrema urgencia estén rezagados, como el distrito de riego de Ranchería que está en veremos desde hace 3 años. “No hemos podido conseguir una respuesta positiva del Gobierno Nacional para construir una solución definitiva al problema de la generación de empleo y la seguridad alimentaria para el departamento”, sostuvo. (Lea: Ganaderos inconformes tras visita del presidente Santos a La Guajira) A su vez, José Domingo Cuello Daza, presidente del Comité de ganaderos de San Juan del Cesar, lamentó que La Guajira esté pasando nuevamente por una situación similar a la de hace 8 meses cuando fue destituida Oneida Pinto y el departamento se quedó sin mandatario. “Este es otro tropiezo que estanca la ganadería y el agro en general. El verano ya llegó y el ganadero necesita apoyo en el tema de alimentación, porque no hay producción de pastos”, indicó. Según el ganadero, esta crisis perjudica a los productores en la medida en que la activación de planes de emergencia o la entrega de suplementos bovinos se verá frenada por la falta de un gobierno departamental que direccione las ayudas. (Lea: Alerta por dramática reducción del inventario bovino en La Guajira) “Aunque no hay estragos como cuando ocurrió en el fenómeno de El Niño, pueden empezar a aparecer si no se presta la atención debida por la misma inestabilidad de la Gobernación**”, manifestó.