Desde el 10 de junio, vendedores de leche cruda de 37 municipios estarán bajo la lupa de la Secretaría de Salud Departamental y el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, con el fin de verificar que el producto provenga de hatos libres de brucelosis y tuberculosis.
A partir del próximo 10 de junio, cerca de 400 jarreadores censados y no censados en los 37 municipios de Huila estarán vigilados por la Secretaría de Salud Departamental, con el apoyo del Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, con el fin de garantizar la venta de leche libre de tuberculosis y brucelosis. (Lea ‘La leche no escapa a la informalidad, alarmantes cifras afectan al sector’)
De acuerdo con el gerente del ICA, seccional Huila, Tito Alberto Suárez Caicedo, luego de una reunión sostenida por funcionarios de la Policía Nacional, el Comité de Ganaderos del departamento y la Secretaría de Salud, se dio inicio al proceso de formalización del Decreto 1880 de 2011, el cual establece que la leche cruda que se comercializa al jarreo debe provenir de hatos libres de brucelosis y tuberculosis.
A partir de esta fecha, la Secretaría de Salud de Huila dará inicio a los operativos en todo el departamento, realizando controles, que servirán de advertencia para los jarreadores. Una vez la idea sea difundida en toda la región, se empezarán a implementar las sanciones económicas y el decomiso del producto.
Por su parte, Ignacio Amador, subgerente de Cadenas Productivas de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, sostiene que la medida obedece a las políticas sanitarias que buscan mejorar la productividad y garantizar la venta de leche, educando al productor.
“Con esta política pública lo que se busca es enseñarle a los productores la importancia de vacunar a los animales y certificar los hatos. Pero hay 2 problemas en la venta de la leche informal: que las industrias no acopian toda la leche, obligando al productor a buscar otro medio para comercializar; y ahora, si decomisan el producto este debe llevarse a laboratorios que certifiquen si es o no apta para consumo humano. La idea no es castigar a la gente, sino iniciar un proceso educativo”, expresó Amador
Para eso, Luis Alberto Mora, profesional responsable de la Vigilancia de Alimentos del Huila, sostuvo que es necesario que los ganaderos certifiquen sus hatos y que a su vez los jarreadores se registren en las oficinas de las Secretarías de Salud de cada municipio. (Lea ‘Los riesgos de consumir leche cruda’)
“Una vez los jarreadores estén inscritos, la idea es que le pidan copias de los certificados de hatos libres de tuberculosis y brucelosis al ganadero productor de leche, de tal forma que cuando se haga un retén ellos puedan poner en conocimiento que la leche está libre de esas patologías”, agregó Mora.
¿Y usted ya certificó su hato?
La medida busca que también los ganaderos del departamento certifiquen sus predios como libres de tuberculosis y brucelosis, con el fin de garantizar la comercialización de la leche libre de estas enfermedades. (Lea ‘Buscan certificar predios libres de tuberculosis y brucelosis bovina’)
Para hacerlo, el ganadero debe registrar el predio ante la oficina del ICA de cada municipio. Luego, debe solicitar con esta misma entidad la certificación, realizar las pruebas que diagnostican el estado de los animales y de esta forma podrá obtener los certificados contra estas enfermedades.