Productores se refieren a las complicaciones que ha generado el cierre de la planta de sacrificio del municipio entre los que destacan la implementación de mataderos clandestinos yel aumento del sacrificio ilegal.
El aumento del sacrificio clandestino tiene seriamente preocupados a los ganaderos de Ubaté debido a las dimensiones que está adquiriendo esta actividad en materia no solo de salubridad y de inocuidad de la carne de res, sino por los problemas de índole económico que proporciona para sus unidades productivas.
Así lo manifestó Giovanni Pinilla, presidente de la Asociación de Ganaderos del Valle de Ubaté, quien al mismo tiempo dijo que, “cerraron hace más de seis meses la planta y no hay en donde sacrificar los bovinos”.
Esto origina serios problemas de salud pública pues la carne que se encuentra en los expendios, y la que consumen los habitantes, se supone que es procedente del sacrificio sin ningún protocolo sanitario. (Lea: Abigeato tiene desesperados a los ganaderos del Valle de Ubaté)
“Además encadena otras actividades ilegales como la implementación de mataderos clandestinos en esta región del territorio colombiano, lo cual, se convierte en un negocio ilegal en el que deben intervenir las autoridades correspondientes”, sostuvo el dirigente.
Según Pinilla, Ubaté maneja un volumen considerable de sacrificio de ganado porque son bovinos que proceden del descarte de las unidades productivas.
Desplazar hasta Chocontá
“Esta situación ha incidido en la baja comercialización de ganado, porque el que quiere sacar a la venta un bovino, lo tiene que desplazar hasta la planta de sacrificio de Chocontá. (Lea: Abigeato y sacrificio ilegal azotan a ganaderos del Valle de Ubaté)
Aunque no es muy lejos pues se encuentra en el mismo departamento y solo 40 kilómetros, el desplazamiento se debe hacer por una carretera de difícil tránsito en virtud a sus malas condiciones.
“Así las cosas, es algo que no resulta a tractivo económicamente porque el transporte es costoso y representa un alto riesgo para el animal por los golpes y el maltrato al que se somete, que igualmente reduce su valor”, reiteró.
De acuerdo con el representa de los ganaderos, otro costo es la guía de movilización que sumado a los anteriores, se recargarían únicamente al productor, lo que en materia económica es una posibilidad inviable, ya que el precio final pierde la razón de ser, que es generar rentabilidad. (Lea: 10 componentes que agobian la producción ganadera del Valle de Ubaté)
“Finalmente la comercialización se constituye en un problema adicional para los productores porque no pueden sacar los terneros a la venta”, resaltó.
Dicha situación, los obliga momentáneamente a criar a estos animales, a sabiendas que cuando tengan la oportunidad de venderlos, el precio no les va a representar la inversión que se le ha realizado”, reiteró el líder gremial de Ubaté.
“Ante el cierre de la planta de sacrificio no existe ningún proyecto para remplazarla como tampoco se avizoran soluciones a la mencionada coyuntura, por lo que solicitamos apoyo a las autoridades correspondientes”, puntualizó el dirigente de Ubaté.