Los ganaderos del departamento están preocupados por la prolongación del verano en la región el cual ha generado escases de comida y graves problemas de desnutrición en los animales, elevando los índices de mortalidad en los últimos meses.

Gustavo Rodríguez, médico veterinario y zootecnista de Bolívar, Cartagena comentó, que el departamento está enfrentando graves problemas de verano, en cinco meses no ha llovido y esto está desatando problemas graves por desnutrición y muertes repentinas en los bovinos.

Esta problemática que se ha acentuado en la zona afecta el bolsillo de los ganaderos; las cifras de mortalidad animal están creciendo y no hay manera de dar control a la situación. (Lea: Grave sequía tiene en jaque a los productores en varias regiones del país)

Cuando se analiza la razón de la muerte, se encuentra que es por desnutrición, mencionó Rodríguez acerca de esta situación que no tiene números exactos para medir la magnitud del inconveniente.

Miguel Torres Badín, presidente del Comité Departamental de Ganaderos de Bolívar aseguro: “tengo un ganadero en Mahates que me dice, que todas las semanas se le mueren 3 animales”. Adicional a esto, la problemática no puede ser mitigada con las ayudas del gobierno, y agregó:

“Hay 570.000 cabezas de ganado en riesgo, para los cuales se necesitarían 20.000 toneladas de silo y el gobierno prometió 2.000 y ya hemos repartido más de 600. Si logrará cumplir la promesa es el 10 % de lo que se necesita. Todos los alcaldes, directores de la Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria (Umata) del departamento llaman al presidente con el grito de auxilio, la situación esta crítica”.

La comercialización por otro lado se ha visto afectada debido a que los animales están bajos de peso y en ese estado nadie los compra.

Torres indicó que “la demanda está subiendo, pero no hay oferta porque los ganados están flacos, entonces los comerciantes se están aprovechando, comprando el ganado flaco para esperar las lluvias”.

Adicional a esto dijo que frente a las peticiones de exportar ganado en estos meses, la situación es crítica porque el ganado no está en condiciones para venderse y si se logra vender, el productor pierde mucho dinero.

Peticiones al gobierno

La petición que realizó Torres al ministro directamente en un consejo de gestión del riesgo fue “reactivar nuevamente el programa de las bodegas de alimentación bovina no gratis, sino subsidiada, rinde más la plata y se ayuda a más personas”. (Lea:Invierno les juega una mala pasada a los ganaderos de Bolívar)

Al activar las bodegas se mitigaría la problemática vendiendo casi a mitad de precio productos como la melaza, el mezclagán, etc., potencializando así, el poco recurso que tiene el ministerio con la población.

En este momento no se está ayudando ni a solucionar el problema, ni a brindar apoyo a los que lo necesitan, por lo tanto, es un llamado para dar solución a los problemas de la región.

Otros departamentos afectados

Cabe destacar que departamentos como Sucre y Cesar presentan la misma problemática. El verano se viene presentando desde noviembre y se ha prolongado aun cuando el país se encuentra en temporadas de lluvias.

En Sucre, Juan Carlos Romero, miembro de la junta directiva del Comité de Ganaderos del departamento, afirmó “Se estima que entre 5 mil y 7 mil cabezas de ganado muertas hacen parte de las pérdidas que tenemos los ganaderos en el departamento”. (Lea: Sequía afecta de forma dramática a ganaderos del norte de Bolívar)

En Cesar los incendios que se han presentado, afectaron recursos forestales y animales. Fadrique Alfonso Rincones Martínez, vicepresidente de la Asociación Departamental de Ganaderos y Agricultores del Departamento de La Guajira, Asogagua manifestó que:

“Las llamas que han sido avivadas por la fuerte brisa, se han extendido de manera ilimitada, arrasando con los recursos forestales, árboles, bovinos e incluso con tigres, y muchos animales más, que habitaban en las montañas. No tenemos aún el cálculo o el censo de los ganados perjudicados, pero en materia de los recursos forestales las llamas han destruido algo más de 10.000 hectáreas”.