La Fundación Corporación Ferias del Atlántico, organizadora del evento, advirtió que debido a una decisión judicial que les obliga a pagar más de $80 millones, la feria no se llevaría a cabo. Según ellos, es el único encuentro ganadero de este tipo en el departamento.   Todos se estaban preparando para celebrar la edición 43 de la Feria Agroindustrial, Ganadera y Equina grado A de Sabanalarga, conocida en la región como “la vitrina vendedora por excelencia del Caribe colombiano”. (Lea: La importancia de las ferias ganaderas)   Sin embargo, los productores no podrán asistir a este importante evento, pues debido a una decisión del Tribunal Superior de Barranquilla, la Fundación está obligada a pagar una importante suma de dinero, que la deja sin recursos.   El proceso remonta a noviembre de 2007, cuando se celebró la versión número 33 de la feria. En aquel entonces, el abogado Darío Alonso Castro reportó el hurto de su vehículo, un campero Toyota Land Cruiser modelo 1998, en el parqueadero designado para los asistentes al evento.   Luego de una batalla jurídica, el Tribunal determinó que la responsabilidad por la pérdida del carro correspondía únicamente a la Fundación, y no a la empresa Interglobal Seguridad y Vigilancia LTDA, contratada en ese entonces para labores de guardia.   Julián Saade, miembro de la junta directiva de la Fundación, se mostró preocupado por la suerte de una de las 3 ferias más importantes del Caribe colombiano, junto a la de Montería y Valledupar. (Lea: Sabanalarga tendría subasta mensual de ganado)   “Aparentemente se robaron un carro, pero qué casualidad que en 40 años, solamente ocurrió ese caso. Fue un solo carro robado del parqueadero, que estaba concesionado a una empresa de vigilancia”, aseguró.   Luego de 8 años de tránsito por los diferentes juzgados, la Justicia determinó el embargo de la cuenta de la Fundación, donde estaban reuniendo el dinero para organizar la versión 43. Según Saade, los $80 millones que deben pagar corresponden a más de la mitad de lo cuesta el evento.   El dirigente calificó este hecho como “alevoso” y consideró que Castro empleó argucias del aparato judicial “para ensañarse con nosotros y obligarle a pagar un carro 2 o 3 más de lo que vale”. (Lea: Alternativas para sacarle provecho a los recintos feriales del país)   No obstante, lo que más le inquieta son las millonarias pérdidas para los ganaderos de la región que aspiraban a mostrar a sus animales en el encuentro y que llevan todo el año trabajando para llegar a la cita.   En la Feria se comercializan más de 1.500 animales de 400 ganaderías de los departamentos del Caribe y de otras zonas del país. Para los organizadores, dejar de hacer la feria generaría un impacto económico para el sector e incluso pondría fin a la entidad encargada del evento.   “Prácticamente nos acabaríamos porque somos una entidad sin ánimo de lucro, no tenemos recursos propios. Trabajamos con lo que se recauda en la feria y con los aportes que muy gentilmente nos dan nuestros patrocinadores”, señaló Saade.   Por su parte, José Félix Lafaurie Rivera, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, conoció el caso e hizo un llamado a la Fundación y al demandante para que lleguen a un acuerdo sin que se vea afectada la feria.   “Sin lugar a dudas, este es uno de los eventos más esperados por los ganaderos de la costa Caribe. Negarle la oportunidad a los productores a mostrar sus ejemplares en este espacio sería lacerar aún más a nuestro sector. Les propongo a ambas partes que concilien y permitan que el evento no se vea empañado por este percance”, declaró.   De acuerdo con informaciones conocidas por este medio, el demandante estaba dispuesto a conciliar por un valor menor ($40 millones) pero cambió de parecer y ahora está exigiendo el cobro total. (Lea: Feria de Sabanalarga celebra este año su edición 42)   Por ahora, hay preocupación no solamente de ganaderos, sino también de los propietarios de equinos, pues también se cancelaría la última feria equina grado A de la temporada en esa región.