Desde el pasado sábado, la movilidad fluvial y terrestre del departamento del pacífico colombiano se encuentra con restricción, afectando ostensiblemente a los habitantes de la región.

Desde el pasado 12 de octubre en la noche, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Farc, decretaron un paro armado en el departamento del Chocó que hasta el día de hoy tiene cerrado el tránsito por carretera con las regiones vecinas y también ha bloqueado la navegación por el río Atrato.

La gobernadora encargada del Chocó, Julieta Gómez de Cortes, reconoció en una rueda de prensa, que el paro armado es una realidad y para prevenir desmanes decretó la prohibición del porte de armas. (Lea: “No más paros armados en Chocó”: Gobernador Tobar)

"Sí hay un paro, hay restricción en la movilidad fluvial y terrestre. Estamos tomando las medidas que se tengan que tomar y se tomarán otras drásticas", señaló la mandataria departamental.

Por su parte, Luis Enrique Abadía García, defensor del pueblo en el Chocó, reportó que no hay servicio de transporte desde o hacia algún municipio del departamento, y agregó que están paralizadas las vías de acceso y salida a la región: la de Medellín, en Antioquia, y la de Pereira, en Risaralda.

“En las últimas horas, combatientes de las Farc han protagonizado diversas acciones armadas en el departamento, como el ataque a un puesto de Policía en Bellavista y a una base militar en Riosucio”, culminó Abadía García.

A su vez, el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, anunció en Quibdó la creación de un Centro Integrado de Inteligencia para el departamento, con el propósito claro de hacer frente a la problemática que aqueja a la región. (Lea: La seguridad en Colombia, entre la inestabilidad y el deterioro)

“Este centro tiene como principal objetivo fortalecer las operaciones del Ejército y la Policía  Nacional en la zona, para evitar cualquier tipo de inconvenientes de orden público”, sostuvo Pinzón.

Además de esto, el jefe de la cartera de Defensa invitó a los transportadores a salir a las carreteras y garantizó el apoyo total de la Fuerza Pública para que su integridad y la de los automotores no corran ninguna clase de peligro.