Gracias a los controles adelantados por uniformados de la Policía Ambiental y Ecológica y El Grupo Carabineros y Guías Montados, fue posible encontrar el lugar, donde se incautó gran cantidad de carne de res lista para su comercialización.

Un operativo de control organizado por el cuerpo de la Policía Ambiental y Ecológica y El Grupo Carabineros y Guías Montados, llevó a que fuera desmantelado un matadero clandestino en la vereda Virable, zona rural de Bucaramanga, donde las condiciones sanitarias en las que se hacía el beneficio eran mínimas.  (Lea: Policía desmantela planta de sacrificio ilegal en Montelíbano)

Según expresaron los uniformados, el lugar no tenía paredes, todo se hacía al aire libre, el sacrificio era sobre un planchón de cemento y la única protección que había era un techo de zinc. Los residuos no recibían ningún tratamiento y eran arrojados a una cañada cercana, razones más que suficientes para clausurarlo.

“Al solicitar la documentación que acreditara la legalidad de la actividad de beneficio no fue presentado ningún documento, por lo cual se procedió a incautar toda la carne de res que estaba en el lugar, avaluada en más de $10 millones”, aseguraron las autoridades. (Lea: El sacrificio ilegal sigue ganando terreno en Cundinamarca)

Ante esta situación Ricardo Navarro, profesional en Gestión de Recaudo y Encadenamiento Productivo de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, en Santander, aseguró que en todo el departamento hay en promedio 130 lugares de esta índole, ya que los productores prefieren arriesgarse a que le quiten su producto a realizar el beneficio en sitios autorizados, porque sus costos se elevarían notoriamente.

“En las veredas y zonas rurales es una práctica muy común, porque quienes se dedican a vender carne, no siempre tienen los recursos para pagar un camión hacia la planta, el impuesto sobre el beneficio, un carro especializado para traer las canales, por lo que realizan el sacrificio sin ningún control sanitario”, puntualizó Torres. (Lea: Alarma en Nariño ante el exceso de sacrificio ilegal)

El material incautado por la Policía fue dejado en manos de las autoridades de salud, quienes se encargaron de darle el manejo adecuado para evitar el consumo de la carne encontrada en el lugar.