El frigorífico que fue cerrado por problemas económicos, volvería a entrar en funcionamiento gracias a la creación de una sociedad mixta público-privada entre el gobierno municipal y los productores.
El sacrificio ilegal de bovinos en el municipio de Tumaco llevó a los propietarios de la planta de sacrificio a clausurarla, ya que la demanda era escasa y esta actividad económica solo estaba dejando pérdidas, a lo que se sumó el incremento de establecimientos dedicados a ello, lo que aceleró la decisión. (Lea acá: Expendedores de carne construirían planta de sacrificio en Caquetá)
Ante esta situación de salud pública, el secretario de Gobierno, Hernán Cortés, manifestó que la administración local firmó un convenio temporal para que el proceso de degüelle se haga en la planta de Pasto o de Llorente, con el fin de brindarles más seguridad a los consumidores de carne de esta región del país.
“Es una medida transitoria, ante el cierre del matadero La Sabana. No es que toda la carne que se va a consumir se vaya a traer de Pasto, eso es temporal y por eso también va a ser habilitado el matadero de Llorente”, argumentó el funcionario. (Lea acá: Certifican planta de sacrificio en Santa Bárbara de Pinto)
Sin embargo, Álvaro Arturo, coordinador de la Unidad Regional de Desarrollo Ganadero de Fedegán en Nariño, aseguró que a quienes se dedican a la comercialización de este producto, no le interesa hacer el sacrificio en una planta, ya que tiene que pagar un valor adicional y prefieren hacerlo en cualquier lugar, así no cumpla los estándares de sanidad y calidad que exige la ley.
“Aunque el matadero de Tumaco, además de estar en la quiebra, no cumplía con todas las condiciones necesarias, era mucho mejor que el beneficio se hiciera allí y no en cualquier sitio sin saber en qué ambiente se sacrifica el ganado”, expuso Arturo. (Lea acá: Luchan para evitar cierre de la planta de sacrificio en Villahermosa)
Según manifestó el secretario de Gobierno, en 2 meses que se reabra la planta, tanto los productores como el departamento van a hacer sociedades mixtas que permitan que el sacrificio se haga en un lugar óptimo y que cumpla las normativas que exigen las autoridades sanitarias.