El Comité de Ganaderos del Área 5, en Zipaquirá, Cundinamarca, manejó el ciclo de vacunación en Yacopí y Caparrapí, la región más afectada por el reciente brote de fiebre aftosa. Aun cuando se reportaron denuncias en el manejo del ciclo, el ICA le volvió a entregar la operación. Los ganaderos de Yacopí, Caparrapí y los demás municipios circunvecinos se vieron gravemente perjudicados por el brote de fiebre aftosa ocurrido en julio pasado, y que obligó al sacrificio de 2.459 bovinos. En medio de la crisis sanitaria, muchos productores denunciaron malos manejos en la pasada campaña de vacunación que podrían haber incidido en el lamentable resultado. (Lea: Advierten que estatus sanitario podría estar en riesgo nuevamente) En estos días de emergencia, CONtexto ganadero habló con varios ganaderos de la zona, quienes afirmaron que el proceso tuvo varias deficiencias a la hora de aplicar el biológico en las fincas del municipio. Por ejemplo, Gustavo Gutiérrez Andrade* indicó que el ICA “brilla por su ausencia” y que el servicio que presta no es adecuado. Añadió que el ciclo de vacunación se ha politizado, porque los encargados de suministrar el biológico son elegidos por afinidad y no por su conocimiento. “Aquí vacuna solo el que quiere o el que es informado a tiempo. Además que en las partes alejadas no se hacen presentes los vacunadores, por esa razón se está fallando y la cobertura no es muy amplia. En mi caso, me interesé por aplicar el biológico, pero el día que vino el funcionario yo no estaba y no se pudo hacer la gestión. A muchos les pasó lo mismo”, lamentó. Lo mismo opinó Fermín Pereira, propietario de ganado en La Palma, quien junto con otros compañeros enviaron un oficio al coordinador de la Cuenta Nacional de Carne y Leche, exponiendo falencias como la falta de difusión cuando se programaron las visitas, el incumplimiento del cronograma estipulado y la negligencia de algunos vacunadores. “Los vacunadores no aplican la vacuna, hay unos perezosos que donde hay 3 o 5 animales, no van hasta la finca. (…) Por ejemplo, a mi finca mandaron una muchacha que no sabía aplicar el biológico, entonces algunos predios vecinos se quedaron sin vacunar porque ella no sabía”, señaló. Responsabilidad de los ganaderos y autoridades La organización encargada para ejecutar la campaña es el Comité de Ganaderos del Área 5, CGA5, de Zipaquirá, con representantes de 32 municipios, entre ellos Yacopí. (Lea: Mal manejo de la vacunación sería la causa de Aftosa en Yacopí) Aunque nunca tuvieron inconvenientes durante los cerca de 20 años que lleva el ciclo, en julio pasado se presentó la emergencia más grave por el brote de fiebre aftosa, que infectó varios predios y obligó al sacrificio de numerosos animales. Frente a esta situación, el saliente ministro de Agricultura Aurelio Iragorri, funcionarios del ICA y de la Cuenta Nacional de Carne y Leche se desplazaron a Yacopí para verificar qué había sucedido exactamente por cuenta de la enfermedad. Si bien todavía no se ha esclarecido cómo llegó el virus a las veredas donde se presentaron los casos, lo cierto es que muchos bovinos presentaron síntomas del virus, porque no contaban con la protección sanitaria. (Lea: Graves denuncias de ganaderos en Cundinamarca tras foco de aftosa) Además de las numerosas críticas a los vacunadores y al comité ejecutor, la responsabilidad por el brote también se debe a los ganaderos que no fueron juiciosos a la hora de inocular a sus bovinos, así como las autoridades que no controlan el transporte ilegal de bovinos. Así pues, la culpa es compartida por el productor que apenas sacaba a unos cuantos animales a inyectar solo por obtener el Registro Único de Vacunación, RUV; el vacunador que vendía el recibo sin aplicar el biológico y lo enterraba en algún sitio; y las entidades como el ICA y la Policía, que no verificaban las guías de movilización.
“En 20 años, el ICA nunca levantó una notificación de sanción a un ganadero por no haber vacunado. Sí había llamados de atención, pero nunca impusieron una sanción”, sostuvo un funcionario de la zona. (Lea: Piden explicaciones al ICA sobre convocatoria para ejecutores del ciclo) La convocatoria del ICA Aun cuando estas falencias no corresponden a la organización que realiza el proceso de inoculación, es claro que debe ser sancionada. Sin embargo, cuando el ICA publicó la convocatoria para licitar 27 proyectos locales, no hizo lo mismo con el de Yacopí. Para los ganaderos y profesionales de la región, la entidad sanitaria tenía la obligación de licitar este proyecto, sobre todo por las denuncias de fallas en la operación del ciclo. Sin embargo, el CGA5 fue designado nuevamente para operar los proyectos que tradicionalmente ha recibido, y ya llevan varios días preparándose para comenzar con el ciclo a partir del viernes 27 de octubre. A raíz del anuncio de la convocatoria, este medio ha conocido los testimonios de varios líderes de asociaciones ganaderas, quienes aseguraron que el Ministerio está utilizando el ciclo para favorecer a los gremios afines a la gestión de Iragorri, con el fin de obtener la contraprestación.(Lea: Denuncian retaliación del Gobierno en la elección de ejecutores del ciclo) Uno de estos ha sido el Comité del Área 5, que hace parte de la Nueva Federación Ganadera, NFG, una asociación paralela a Fedegán creada con apoyo del Ministerio de Agricultura. Tanto la NFG como el Comité han demostrado su afinidad con la gestión del ministro Iragorri, en contravía con la gran mayoría de productores agropecuarios. Líderes gremiales y ganaderos cuestionaron que este comité haya recibido la ejecución del ciclo, y con ella los recursos por realizar el proceso, a pesar de que el brote más grave de aftosa se presentó bajo su zona de influencia y a pesar de las denuncias por las fallas en la vacunación. CONtexto ganadero habló con un representante del comité, quien se abstuvo de hacer declaraciones. También intentamos contactar al encargado de la vacunación en el primer ciclo, pero hasta el momento de publicación de esta nota no atendió nuestra llamada.