Las estructuras construidas en Nunchía y Villanueva llevan años sin funcionar, el abandono y falta de interés por hacerles el mantenimiento correspondiente impiden que decenas de familias puedan acceder al agua en épocas críticas. Estos sistemas son grandes aliados de los productores agropecuarios, pues permiten que puedan acceder con mayor facilidad al agua en aquellas épocas de extrema sequía, como las que frecuentemente se presentan en Casanare. (Lea: Casanare le apunta a la construcción de distritos de riego) Sin embargo, desde hace años estas obras no funcionan, sus usuarios ven como pasan nuevas administraciones y desde el gobierno regional no hay ningún tipo de inversión que permita ponerlas en marcha, por lo que están condenadas a dañarse por completo ante la evidente falta de mantenimiento. José Ismael Ortiz, representante legal de Asoprocanal, asociación que está al frente del distrito de riego conocido como Procanal, en Nunchía, aseguró que la obra se viene adelantando desde hace 16 años, pero no ha sido concluida por cuenta de las intervenciones que empezaron a hacerse sobre el río y caño Pauto. Argumentó que para que funcione el distrito es necesario concluir una serie de construcciones y reparar todo lo que está dañado, por lo que están haciendo un análisis en compañía de la Gobernación del Casanare para encontrar una solución real y poner en funcionamiento a Procanal. (Lea: Ayuda temprana del Gobierno hubiera mitigado crisis en Casanare) Escuche las declaraciones de Ortiz frente al distrito de riego.
“En época de verano el recurso vital es bastante escaso, lo que afecta los cultivos y la ganadería de unas 120 familias que hacen parte del proyecto. Incluso en una reunión que se llevó a cabo en Orocué, el ministro de Agricultura nos dijo que se debía terminar la obra por cuenta de las inversiones considerables que se han hecho, pero hasta que no nos entreguen los análisis no sabremos cuánto vale terminar el distrito”, argumentó. En la misma población hay otra estructura con la que se presenta la misma situación. Se trata del distrito La Capilla, administrado por Asocapilla. Su representante legal, Leo Marín Albarracín, confirmó que no está funcionando desde hace 10 años por cuenta de una bocatoma mal hecha, hecho al que se le suma que el tanque de almacenamiento y la tubería han tenido inconvenientes. “Nosotros estamos proponiendo que se construya un nuevo distrito, porque de lo que hay nada se puede recuperar”, contó Marín Albarracín, quien agregó que hace en los últimos años han hecho gestiones con el Incoder para llevar a cabo la obra, "incluso el subgerente viajó desde Bogotá al lugar, se hicieron varias visitas, pero hasta el momento han sido más los trámites que las respuestas puntuales". (Lea: Orinoquía carece de sistemas de riego por falta de inversión) En Villanueva ocurre algo similar: el sistema no está funcionando en su totalidad, así lo denunció Rusblet Vega Rojas, representante legal de la asociación Asourcaracolí, la cual está al frente del distrito de Caracolí. El funcionario precisó que la obra de infraestructura fue construida en 1996, razón por la que, 20 años después, muchas de sus partes ya cumplieron su vida útil. El representante aseguró que en el año 2010 cuando asumió la operación del sistema sus condiciones no eran las mejores, ya en ese momento presentaba rastros de abandono, pues no se designó nunca a nadie para su administración y cuidado. “Ya hemos participado en las convocatorias del Incoder, incluso en una pasamos, lo que nos permitió tener estudios y diseños para rehabilitar el sistema. Estamos a la espera de que la entidad, el Gobierno Nacional o departamental nos apoyen en todo ese proceso”, remató. (Lea: Sistemas de riego, beneficio clave para el agro colombiano)