El ganadero oriundo de Neiva, Huila, se presentó en las instalaciones de Fedegán, angustiado a decir que sus vacas estaban enfermas y que necesitaba asesoría. “Necesito asesoría para saber qué tengo que hacer”, dijo Hipólito Pérez, un ganadero que llegó a la sede del gremio cúpula de la ganaderia, desesperado a exponer el caso de vacas enfermas en su predio de Neiva, Huila. Según él, por los síntomas que presentan, tienen fiebre aftosa. Don Hipólito es un ganadero de pura cepa, que se expresa con seguridad y habla con propiedad del tema ganadero bovino. Su mirada recia y su voz firme son de un productor luchador, de esos que no se dejan amilanar ante cualquier dificultad. No obstante, su rostro reflejaba la angustia de su situación. “Ordeño 48 vacas a diario en Neiva específicamente en la vereda Yucales. Son vacas F1 resultantes de un cruce de Holstein y Gyr que recién paridas tienen una alta producción diaria”, explicó. La enfermedad… “Hace 12 días veo que a ocho de mis vacas les suda el hocico y 14 tienen mastitis”, añadió, a la vez que relató que tiene un toro al que le hinchó el pene "y a lo que orina expulsa chorros de sangre”. Para él, sus vacas tienen fiebre aftosa, y fue enfático en afirmar que tiene sus registros de vacunación al día. “El 17 de mayo vacuné mis animales”, afirmó. Traslado sus animales El ganadero de Neiva, Huila, dijo que movió sus animales enfermos para otra finca de su propiedad que se ubica en el municipio Vega Larga, vereda el Carillo, a 4 horas de camino. “Las lleve para allá porque allá tengo comida para darles. De todas maneras expresó su preocupación por el cambio de clima”, remató.