Gracias a esta tecnología, un productor ubicado en Casanare ha logrado sortear de forma favorable los veranos que golpean al departamento. En 2014, por ejemplo, tuvo una importante reserva de agua mientras que la mayoría sufrió por la ausencia del recurso. Los actuales fenómenos climáticos que vive el país evidenciaron las falencias que existen a la hora de almacenar agua de cara a temporadas críticas. Hasta que El Niño no mostró la fuerza con la que iba hacer presencia en el país, pocos se preocuparon por mejorar los pozos profundos, construir jagüeyes y reservorios, o implementar estrategias que les permitieran tener el recurso en momentos de escasez de lluvias. (Lea: El joven héroe que construyó molinos eólicos con chatarra) Sin embargo, en Hato Corozal, Casanare, un productor pecuario desarrolló y patentó un molino a viento, idea con la que no solo ha soportado de forma adecuada las dificultades propias de la sequía, sino que ha seguido siendo eficiente durante los periodos más secos. Régulo Figueredo, ganadero creador del molino, en diálogo con este medio aseguró que la idea surgió ante la imperiosa necesidad que tiene el mundo de extraer grandes cantidades de agua. De paso reveló que su propuesta es mucho mejor de las que ya existen en el mercado, ya que al ser patentado tiene un valor agregado, como es la capacidad de resistir huracanes; es de aspas flexibles, por lo que no se rompe con facilidad y soporta altas velocidades del viento. “A la bomba le hice una invención, extrae agua subiendo y bajando, en ambas direcciones. Los molinos antiguos o que han funcionado en el mundo, son de ascenso. Es decir, recoge, sube y bota el agua, este que yo creé puede hacerlo en ambas direcciones”, explicó Figueredo. (Lea: 10 mandamientos para tener agua en la finca ganadera)
Fuente: Javier Betancour Rodríguez Otra de las ventajas que tiene el molino es que su vida útil es de más de 60 años, por lo que el creador sostiene que su máquina está pensada a futuro, equiparando a las que se construían otrora. “El molino no puede ser visto como un gasto, sino como una inversión a largo plazo. Es un equipo que genera ganancias, ahorra costos y brinda suficiente agua para que los animales tengan el recurso disponible todo el tiempo, de paso permite conservar la fauna y la flora propia del Casanare”, agregó el productor. Falta de apoyo No obstante, para el inventor casanareño uno de las grandes limitantes que ha tenido su idea es el poco apoyo que ha recibido por parte de los gobernantes de turno. A su juicio, los mandatarios no han dimensionado el apoyo y beneficio que podría generar el molino en el campo. (Lea: 14 opciones para tener agua en fincas ganaderas) “Esa sería una alternativa viable para que los recursos no se dilapiden y se inviertan verdaderamente. Es difícil encontrarse administradores que realmente tengan consciencia a la hora de apostarle a proyectos de larga duración”, amplió. Si está interesado en conocer más del proyecto de Régulo Figueredo, puede contactarlo a través del teléfono 313 453 9335.