“Se deben adelantar procesos que den valor agregado a los productos que se obtienen en la región como resultado del ejercicio del quehacer de nuestros agricultores y ganaderos. También es necesario comenzarun proceso que permita acceder a nuevos mercados y disminuir los procesos de intermediación, lo que permitirá mejorar los ingresos de los productores, acciones que se van a ver reflejadas en la calidad de vida de los productores”, dijo el secretario.   A la preocupación de la gobernadora no es ajena el sector agropecuario. Eudoro Álvarez, dirigente de Dignidad Arrocera y representante en el departamento de Dignidad Agropecuaria, aseguró que lo primero que debe hacer la actual mandataria es corregir los errores de la administración anterior, en la que los $40 mil millones destinados para el sector agrario se gastaron, según aseguró, en ‘mermelada’. (Lea: Ganadero: aliste su bolsillo, los costos de producción subirán)   “Se debe hacer es un análisis de lo que sucedió para corregir errores tan garrafales. A eso se le suma el respaldo político a los productores endeudados para poder reactivar la producción de ciclo corto. Solo requería pararse, hablarle al ministro de Agricultura y exigirle al Gobierno que dicte una medida, que no es una derogación presupuestal sino que es un préstamo, para activar 20 mil hectáreas de arroz que están bloqueadas por las deudas”, argumentó.   Su propuesta no paró ahí, para el dirigente sería importante que la Gobernación del Meta apoyara los mercados campesinos en los que están trabajando 17 organizaciones metenses. Según confirmó, en los 5 años de funcionamiento y 159 eventos que se han adelantado de esta naturaleza, nunca han recibido recursos, por el contrario ha habido “indiferencia y hostilidad por parte de la administración departamental”.   Por su parte, Eduardo Arias, gerente del Comité de Ganaderos del Meta, aseguró que ante la reducción del presupuesto uno de los rubros que más afectado se verá es el de la infraestructura vial, especialmente en la mejora de las vías terciarias, situación que perjudicará en el tiempo la salida de productos agrícolas y pecuarios. (Lea: Alza del dólar frenó crecimiento del Wagyu en Colombia)   “A eso se le suman algunas iniciativas de impacto regional que vienen funcionando desde tiempo atrás. En nuestro caso, estamos adelantando un proyecto con recursos del programa Pares en favor del sector lechero. No obstante, es un programa que requiere una inversión adicional y esperábamos que viniera por parte de la Gobernación, por lo quedaría estancado”, reseñó.   El gremio no es pesimista y espera contar con una partida presupuestal por cuenta del Sistema General de Regalías o los programas de Ciencia y Tecnología.     “En la medida en la que nosotros podamos presentar proyectos al Gobierno tendremos la oportunidad de recibir recursos que solventarían la disminución de presupuesto en el departamento”, remató el dirigente ganadero. (Lea: Austeridad: una premisa constante en el sector ganadero)