Desde 2014 los proyectos fueron aprobados y viabilizados, pero la Cartera no ha entregado los recursos correspondientes, impidiendo el normal desarrollo de las propuestas. Los beneficiados piden que se dejen a un lado las excusas y se giren los dineros prometidos en su momento.   Durante 2014, el Ministerio de Agricultura adelantó un programa que cautivó al sector agropecuario nacional: las Alianzas Productivas. Miles de asociaciones estructuraron propuestas novedosas en aras de mejorar sus condiciones de producción y la comercialización de sus materias primas. (Lea: Amplían plazo para entregar proyectos de Alianzas Productivas)   Sin embargo, no todo ha salido según se planeó inicialmente. En Santander, hay una serie de grupos de campesinos y ganaderos que presentaron sus proyectos, los cuales a pesar de haber sido aprobados, aún no reciben los recursos prometidos para su desarrollo.   El centro de acopio que no llega a Sucre   Sucre es un pequeño municipio ubicado a 240 kilómetros de Bucaramanga, capital de Santander. Con mucha ilusión, la Asociación de Lecheros de la población, Asolesu, presentó una Alianza Productiva al Ministerio de Agricultura en 2014 con el objetivo de construir un centro de acopio lácteo, debido a que el lácteo era muy mal pago en la región, por lo que un tanque de frío y una serie de capacitaciones permitirían que la botella de leche de 750 milímetros se pagara a más de $400.   Para lograrlo, buscaron ayuda de entidades como el Servicio Nacional de Aprendizaje, Sena; la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán; y la Cámara de Comercio con quienes se propuso formar a los productores de la población y ayudarlos en su propósito de obtener un líquido de mejor calidad, para que el aliado comercial que se presentó en la alianza, Alquería, pagara un precio justo por la leche. (Lea: Alianzas productivas beneficiarán a 30 proyectos en Huila)   Sin embargo, cuando todo estaba claro, ya se tenía listo el predio para la instalación del centro de acopio, se habían firmado los contratos con la Secretaría de Agricultura departamental y la Alcaldía de Sucre, empezaron a presentarse los problemas con el Ministerio de Agricultura.   Adriana Hernández, representante legal de Asolesu, en diálogo con este diario, afirmó que durante el año 2015 nunca se tuvo del Ministerio una respuesta en las diferentes oportunidades que se quiso saber por los recursos prometidos para ejecutar la propuesta.   “Siempre manifestaron que estaban adelantando la licitación para la fiducia o contrataciones. Durante todo el año pasado la respuesta fue la misma y no hubo evolución alguna”, manifestó Hernández. (Lea: Nariño presenta proyecto de Alianzas Productivas 2013)   Ante el nulo avance en el MinAgricultura, Asolesu buscó que la cartera departamental y la Alcaldía hicieran entrega de los recursos prometidos para ir avanzando en la construcción del centro de acopio. La propuesta fue negada porque la totalidad de los dineros deben estar disponibles para que la asociación ejecute en la totalidad la alianza.   “Este año empezamos a consultar con el Ministerio, pero las respuestas siguen siendo las mismas. Por ese motivo, los representantes legales de las asociaciones que estamos viviendo la misma situación nos reunimos. En esos encuentros ya se planteó la posibilidad de presentar un derecho de petición con copia a la Procuraduría para que dicha entidad entre a apoyarnos y logremos una respuesta real”, amplió Adriana Hernández.   La alianza productiva beneficiará a 50 familias. Tiene un valor de $172 millones; de ese monto, la Gobernación de Santander aportará $92 millones, el resto le corresponde al Ministerio de Agricultura. (Lea: Alianzas productivas buscan renovar la ganadería en Guaviare)   Albania sigue sin potencializar su producción de guayaba   En 2014 se presentó ante el Ministerio de Agricultura una alianza productiva entre la Gobernación de Santander, la Alcaldía de Albania y la Asociación de Productores de Guayaba del municipio. En su momento se sumaron la Cámara de Comercio de Bucaramanga, el Sena y Asohofrucol.   El propósito del gremio local era que la iniciativa se ejecutara ese mismo año, debido a la agilidad con la que se adelantó el proceso. No obstante, tal cual como ocurrió con Asolesu, la cartera agropecuaria presentó inconvenientes a la hora de entregar los recursos.   Wilmer Granados, representante local de la Asociación de Productores de Guayaba de Albania, habló con este diario y aseguró que ante la situación del MinAgricultura, intentaron que tanto la Gobernación de Santander ($80 millones), como la Alcaldía local ($40 millones) les entregaran las contrapartidas presupuestales ofrecidas para empezar con la ejecucuión del proyecto, pero no fue posible por el incumplimiento del Gobierno. (Lea: Casanare presentará 29 proyectos al programa de Alianzas Productivas)   “Al ver que no ocurría nada con el dinero, nos reunimos los representantes de las 11 alianzas productivas del departamento que están aprobadas. Presentamos un derecho de petición al Ministerio de Agricultura, que no fue respondido, para que nos explicara por qué no podíamos ir trabajando con la plata que estaba disponible”, dijo Granados.   El panorama este año no es muy distinto al de 2015, según explicó el representante de los cultivadores de guayaba, ya que desde el MinAgricultura les dijeron que no había dinero disponible.   “Vemos que desde el Ministerio nos están tomando mucho del pelo. Ya cumplimos todo lo que nos exigen, pero no nos dan respuestas concretas. Muchos campesinos vivimos de los proyectos que logramos obtener fuera de nuestras zonas, porque los municipios son muy pequeños para financiar iniciativas productivas”, argumentó. (Lea: Productores en Quindío buscan beneficio de Alianzas Productivas)   La alianza beneficia a 40 familias productoras de guayaba, cada una posee una hectárea del cultivo. La idea es que se destinen $565 millones para mantener, sostener y comercializar el producto tanto en fresco como para la industria. Ya están listos los aliados comerciales, 2 de ellos ubicados en Vélez (Santander) y otro más en Chiquinquirá (Boyacá).   La ilusión de Sucre y Albania por hacer realidad los proyectos sigue latente, la responsabilidad está en manos del Ministerio de Agricultura.