En busca de que el verano no afecte los predios de productores de Tauramena, el FNG y el Ministerio de Agricultura adelantaron un taller en Incentivo a la Asistencia Técnica Gremial– IATG, enfocado a la planeación forrajera y la producción de comida para las temporadas críticas.   56 productores ubicados en el municipio de Trinidad hicieron parte del programa IATG que se adelantó en la zona. El propósito fue capacitarlos  en la elaboración de suplementos alimenticios. (Lea: Ninguna especie se salva del verano en Casanare)   Durante el primer ciclo de formación, se trató todo lo relacionado con la planeación forrajera (calcular el número de animales dependiendo de la oferta de pastos que posee el predio). Mientras que en el segundo, el aprendizaje estuvo dirigido a prevenir el fenómeno de El Niño, elaborando suplementos para los semovientes (silos, henos y bloques multinutricionales).   Jairo Medina Sánchez, profesional de gestión productiva y salud animal del Fondo Nacional del Ganado, FNG, en la población, aseguró que las charlas fueron dictadas bajo la modalidad teórico-práctica, con el objetivo de que los productores aprendan a hacer uso racional de sus pastos, conozcan la forma de consecharlos y conservarlos para la temporada seca.    “El trabajo que se adelantó en el municipio fue semipersonalizado. El experto visitaba un predio en la mañana y otro en la tarde. Durante cada sesión se reunían 4 productores quienes primero aprendieron la teoría y luego pasaron a ponerla en práctica con los materiales necesarios para la elaboración de los silos, henos o bloques, dependiendo de lo que cada uno hubiera elaborado”, argumentó Medina. (Lea: Más de 3.000 reses muertas por verano en Arauca y Casanare)   Nelson Sánchez, ganadero de la zona y quien participó activamente en el curso dictado por el FNG en asocio con el Ministerio de Agricultura, destacó el conocimiento aprendido, el cual empezará a poner en práctica de inmediato. Sin embargo, lamentó que la Cartera Agropecuaria no haya destinado más materiales para la elaboración de los bloques, por lo que esa inversión deberán hacerla con sus propios recursos.   “Lo aprendido va a ser muy importante de cara a lo que se viene. Por fortuna yo tengo un pozo profundo de 42 metros y 6 pulgadas, pero no nos podemos confiar y debemos prepararnos muy bien. El tema es que hay ganaderos perezosos que no hacen las cosas bien y ellos son los que requieren con más urgencia una ayuda”, apuntó.   Sin embargo, entre los ganaderos de la región hay preocupación, ya que ni la Gobernación ni la Corporación Autónoma Regional está adelantando algún tipo de plan de prevención o mitigación, en aras de no repetir lo ocurrido en 2014, cuando por cuenta de la sequía miles de animales murieron.  (Lea: Alternativas para enfrentar una sequía prolongada en la ganadería colombiana)   “No hay ningún pronunciamiento por parte de esas entidades. Las oficinas no nos han manifestado ni se ha hecho ninguna propuesta de mitigación para los efectos del fenómeno de El Niño, asumimos que eso se deben al cambio de mandatarios. Esperamos que este verano que se aproxima no sea tan fuerte ni desastroso como otros anteriores que han azotado al Casanare”, remató el funcionario del gremio.   Durante el verano de 2014, más de 20 mil animales murieron a causa de las altas temperaturas y la escasez de agua en esta región.