Los productores de Asociación de Ganaderos y Productores Agropecuarios del Bajo Magdalena lograron un acuerdo con la empresa Inversiones Agro Ríos, para aprovechar el forraje que crece en los cultivos de palma de la Hacienda Vitola. Los ganaderos de este municipio de Magdalena están viviendo una grave crisis por cuenta del verano, pues ya no tienen alimento ni agua para el ganado, y por eso han tenido que buscar otras opciones para conseguir comida para sus animales. “Con la Asociación conseguimos el pasto con la hacienda Vitola, que tiene producción de palma. El gobierno municipal nos ayudó con el transporte del pasto hasta Plato, y después les toca a los ganaderos llevarlo hasta sus fincas”, aseguró José Carlos Rodríguez Rivera, profesional extensionista en Plato. Según el funcionario, las pasturas que crecen en las producciones de palma constituyen una “plaga”, pues absorben los nutrientes de los fertilizantes que emplean los cultivadores. Por esta razón, muchas explotaciones cortan los forrajes y los desechan sin darles mayor uso. (Lea: Ganaderos de Magdalena buscan soluciones para enfrentar el verano) En vista de que no recibieron más ayudas de alimento ni tenían dinero para comprar silo a $370 mil la tonelada, los productores decidieron aprovechar este pasto y secarlo al sol para obtener heno y darlo de comer a sus ganados. Escuche las palabras del profesional extensionista José Carlos Rodríguez
Los afiliados alquilaron maquinaria que hace parte de la finca Jesús del Río. A la hacienda Vitola llegaron con cortamalezas, recolectoras de pasto y enfardadoras, con las cuales cortaron el pasto en rollos, que pesaban entre 350 y 500 kg. (Lea: Ganaderos de Plato se unen para formar nueva asociación) “Estas pasturas son muy completas, porque le roban alimentación a las palmas, entonces se encuentran con muy buenos nutrientes. Además, como se cortaron en la etapa de floración, los tienen en sus hojas y los animales los absorben mejor”, añadió Rodríguez Rivera. Fue él quien hizo los acercamientos con Rafael García, propietario de la finca y administrador general de la empresa Inversiones Agro Ríos. Con él lograron el acuerdo en que quedó estipulado que la empresa cobra el 30 % del total alimento que extraen los ganaderos. Un 40 % se destinó para el productor que presta la maquinaria y el 30 % restante se reparte entre los 30 miembros de la asociación, quienes también aportan el combustible para las máquinas. La empresa cuenta con 1.000 hectáreas de palma y produce 2 variedades, Dami Las Flores y ASD Costa Rica. En cuanto los pastos, en la zona se dan el angleton, la estrella africana y el admirable. (Lea: Fruto de palma nativa, una opción económica para alimentar ganado) “El pasto es una gramínea de rápida recuperación, y eso dificulta las labores de cosecha y de riego. Como es abundante, también hace competencia en cuanto a fertilizantes y no es conveniente tenerlo en gran cantidad”, aclaró García. Según el administrador de la empresa, este sistema no solamente benefició a los miembros de la Asociación, sino también a otros ganaderos que se acercaron a cortar forraje a granel o incluso arrancando con la mano. El acuerdo representó un alivio para los ganados y los bolsillos de los asociados, aunque se suspendió por falta de recursos, pues alquilar la maquinaria y conseguir el transporte siempre resulta costoso, sobre todo para los pequeños ganaderos. (Lea: Ganadero hizo heno para sus reses y le alcanzó para la venta) “Desde nuestra entidad estamos haciendo gestiones para comprar un banco de maquinaria, lo que sería más económico y ayudaríamos más a los ganaderos. La crisis continúa, porque así haya llovido, está cayendo agua, no pastos. Y las fincas todavía están por recuperarse”, señaló el profesional.