Mientras que los productores de municipios como Cajicá y Zipaquirá han disfrutado de un tiempo favorable a lo largo del año, el tiempo atmosférico ha sido más inclemente con los trabajadores pecuarios de otras zonas como el valle de Ubaté, perjudicados por el verano.

Enrique Triviño, ganadero y propietario de la finca El Chorro ubicada en Zipaquirá, explica que en la actualidad, las condiciones climáticas se han sectorizado, ocasionando que ya no ocurra los mismos fenómenos en una zona específica, como ocurría antes.

“La condición climática es muy parcializada y no cumple con el rigor de hace unos años, que según los históricos decíamos que en determinada época va a llover y en otras habrá sequía”, indicó. (Lea: Ganaderos de Cundinamarca afectados por recientes cambios de clima)

De acuerdo con el productor, si bien las temporadas secas o de lluvia se han mantenido en la región, hay sectores donde esta generalización ya no se puede hacer. Por ejemplo, en su carro particular, en los terrenos que tiene su finca, el tiempo ha sido más favorable.

“Pero en el caso de Ubaté, en todo el valle ha habido un clima muy seco. En Zipaquirá, hay unas veredas que han estado muy afectadas por la sequía, y otras que no. Yo me muevo hacia la zona alta del pueblo o por Río frío, donde por fortuna no ha hecho falta agua”, manifestó.

Lo mismo expresó Eleazar Corredor, ganadero en Cajicá, quien afirmó que el 2019 ha sido un “año maravilloso” porque no ha tenido dificultades para conseguir agua y alimento para el ganado. (Lea: Bajas temperaturas en Altiplano cundiboyacense congelan hasta la leche)

“Desde que haya lluvia, no hemos tenido problema para el alimento. Yo tengo el predio hacia el lado de Tierra Negra donde ha llovido más, pero tengo amigos de la zona de Chiquinquirá y de Ubaté, y en este momento me dicen que todavía hay harto verano”, confirmó.

En efecto, mientras que la sabana de Bogotá ha tenido un tiempo atmosférico ideal para la producción de leche, no ha sido igual para grandes regiones productoras, que han tenido que lidiar con terrenos sin pastos para alimentar al ganado como señalaron ambos empresarios.

“La circunstancia del cambio climático ha afectado de manera disímil a toda la zona. Hay unas áreas donde se ven más los efectos del clima, donde llueve más de la cuenta, o en otras no llueve”, expresó el ganadero de Zipaquirá.

Triviño también advirtió que este comportamiento errático es mucho peor cuando se presentan las heladas, por los fuertes bajonazos de la temperatura. (Lea: “Precio de leche no responde a los incrementos de los costos”, dicen ganaderos)

“En zonas altas de páramo, los fríos han sido bestiales. Hemos tenido que trasladar ganado o perderlo por el exceso de frío. Durante el día, tenemos un promedio de 10°C, y en la noche 5°C, pero en este año se han descendido a menos por la influencia del clima”, indicó.