El Ministerio de Agricultura anunció que enviaría 400 toneladas de silo de maíz a El Banco y otros municipios, pero solo llegaron 280. Los productores reclaman más atención porque no tienen alimento para sus ganados. Anaxímenes Torres Jiménez, ganadero de El Banco, ha atravesado grandes dificultades para conservar su ganado. Hace 6 años, en la temporada invernal de 2010, perdió 25 animales. Y hoy, por cuenta del intenso verano, van 3 vacas y 5 terneros muertos. “Esto es terrible (...) los potreros están acabados. Esperábamos una ayuda del Gobierno que nos iba a mandar un poquito de silo. Entregamos los papeles y no salió nada, nos quedamos esperando”, afirmó. (Lea: Magdalena sufre el rigor de un verano que no cede terreno) El ganadero de El Banco cuenta la terrible situación que está viviendo por culpa del verano
El productor envió sus documentos para ser beneficiario de la entrega de silo de maíz que hizo el Ministerio de Agricultura al Comité de ganaderos de El Banco, Cogaban. La entidad anunció que enviaría 400 toneladas, pero solo llegaron 280. Por esta razón, muchos de los ganaderos que aplicaron para estas ayudas se quedaron esperando, incluido Torres, que se vio obligado a descargar su finca y malvender sus animales porque se quedó sin alimento. “Las vacas que uno ve que se están quebrando, son las que primero se venden. Prefiero vender ganado en vez de verlo morir. Una vaca tipo leche que le cuesta a uno $2 millones, tiene uno que darla en $700 u $800 mil pesos”, agregó. Jesús David Numa Saad, gerente de Cogaban, señaló que el silo entregado por el Gobierno ya se agotó, y lamentó que no haya implementado políticas en pro de esa región. (Lea: Ayudas para combatir El Niño llegan, pero no son suficientes) “Nosotros tenemos una riqueza natural en esta zona, que son los ríos Magdalena y Cesar. Es lamentable que el Estado no apoye para sistemas de riego en la región, y a través de las Umatas o de los comités de ganaderos, organizar unos proyectos con bancos de maquinaria para sembrar comida y venderla en época de escasez”, aseguró. Ante la falta de comida y de agua, los ganaderos se han visto obligados a trasladar sus semovientes a otras regiones o malvenderlos. Los que conservaron sus animales debieron construir pozos profundos para mantener agua en los bebederos y ofrecer sal mineralizada y suplementos. Declaró que la región está “abandonada” por el Gobierno, pues la presencia de funcionarios en esa zona que puedan prestarles ayuda es nula. Reclamó mayor acompañamiento y participación del Ejecutivo y del Ministerio de Agricultura para que mire de frente la problemática real que están viviendo. “Hemos pasado proyectos, pero como todo en este Gobierno se queda en el papel. Nos dicen que sí, que sí lo aprobaron, y nada”, sostuvo. (Lea: Ganaderos de Santa Ana se sienten abandonados por el Gobierno) Aunque reconoció la ayuda brindada por el Estado, aseguró que no fue suficiente para un Comité como Cogaban, que cuenta con más de 130 afiliados, maneja casi 1.200 predios con 180 mil reses y cubre 7 municipios: Barranco, Hatillo, San Martín, Alto del Rosario y El Peñón, en Bolívar, y El Banco y Guamal en Magdalena. Ausberto Beleño Benavides, profesional en El Banco de Gestión Productiva y Salud Animal del Fondo Nacional del Ganado, FNG, contó que las reses están rebuscando el alimento, aquellos pastos que aún se ven verdes en los playones de las ciénagas. (Lea: Así vive un ganadero la falta de agua en Magdalena) “Del Ministerio llegó una tonelada de silo para cada ganadero, pero eso duró 20 días. La última entrega fue el 11 de marzo, o sea que ya se les acabó. Además, le dan una tonelada al que tiene 8 animales, y al que tiene 60, le entregan lo mismo, o sea que a este se le acabó el alimento hace mucho más tiempo”, remató el profesional.