Manifiestan que el precio de la leche no sube hace cuatro años y que los costos los tienen acorralados. Denuncian que no reciben apoyo del Gobierno y que no hay política para el sector ganadero, y que la industria pasteurizadora maneja el tema a su antojo.   Dos ganaderos grandes de Cundinamarca manifestaron su preocupación porque la industria no incrementa el precio de la leche pagado al productor mientras que el costo de todos los insumos suben de manera permanente.   “Hace más de 4 años me pagan el litro a $1.100 y lo que la industria sube en algunas ocasiones, después lo vuelve a bajar, mientras tanto aumentan los costos en general, los insumos agropecuarios, el concentrado, los abonos, etc”, denunció María Helena Triviño, quien lleva más de 30 años como productora de lechería especializada. (Lea: ¿Por qué los precios de la leche no suben al mismo ritmo que los demás productos?)   La industria dice que no sube el precio porque hay bastante existencia de este producto en el mercado, pero uno observa que el Gobierno permite el ingreso al país de sueros y de leche en polvo. Entonces no se entiende qué pasa.   El precio al consumidor es alto en relación a lo que nos pagan a los ganaderos. Además se volvió un producto de lujo. La gente que gana un salario mínimo no puede tomarse un litro de leche porque ya cuesta algo más de $2.900.   Es una situación difícil y muchas ganaderías se han acabado por eso. Si a uno le hace falta la comida o insumos para los animales tiene que rebuscarse como sea, pero a la industria eso no lo afecta.   “Cada vez los impuestos suben más y la reforma tributaria fue un desacierto. Lo que hizo fue dificultar las cosas, Cada vez estamos más apretados y el Gobierno no ayuda en nada”.   Manifestó que el robo de ganado por los lados de Cajicá, Suesca, Zipaquirá, se observa por todas partes y uno como ganadero se siente desprotegido.     Es de anotar que el caso de abigeato ha sido denunciado por los ganaderos a través de CONtexto Ganadero en diferentes oportunidades (en marzo, junio y octubre).  (Lea: Alarma por incremento de la inseguridad en Zipaquirá)   Si no hubiera tanta corrupción en el país, Colombia sería un país muy rico y habría trabajo para todo el mundo, agregó.     Me siento acorralado   En igual sentido se pronunció Juan Manuel Brigard, ganadero y agrónomo del municipio de Nemocón, también de Cundinamarca, quien a su vez, dijo que se siente acorralado.   “Me pagan la leche a $980 caliente, pero con los descuentos, incluido el de la cuota parafiscal, recibo $940 neto, hace varios años”.   Brigard lleva 40 años generando valor en el sector y actualmente produce 900 litros de leche diarios, lo cual significa que al mes los descuentos suman 1 millón 80 mil pesos.   Considera que la industria pasteurizadora maneja todo a su antojo. El Gobierno no los controla y es un mercado de monopolio. (Lea: Ganaderos de Cundinamarca desmotivados por el precio de la leche)   “Estoy que saco la mano. En vez de apoyo recibo sorpresas. El Gobierno exige infinidad de cosas a través de las Administradoras de Riesgos Profesionales- ARP, cada día ingresa más leche al país, generan mayor carga tributaria, no hay políticas para el sector, ni el clima ayuda. “Estoy pensando en vender todo”.   Estamos solos y las entidades oficiales del sector agropecuario no apoyan al productor ganadero.