En ese sentido también se manifestó William Cristancho, presidente del Comité de Ganaderos de Paz de Ariporo, quien dijo que lo que han podido analizar los miembros del sector es que todo lo que tiene que ver con el tema de justicia y control es muy precario, y aún más en la región del llano que es tan extensa.   A raíz de esta situación, Cristancho comentó que están buscando la forma de que los ganaderos se unan y se comuniquen a través de redes de información, para alertar o reportar cuando se conozcan de movimientos sospechosos o robos de ganado como tal.   "Estamos tratando de trabajar con las autoridades, sin embargo es muy difícil", confesó.   De acuerdo con él, esta problemática va a seguir afectando a los ganaderos durante 2017 y cada día va a ser peor porque con el aumento de los impuestos y del desempleo, las personas tendrán más necesidades y en su intento por 'rebuscarse', algunos optan por el abigeato. (Lea: Detrás de cada caso de abigeato hay culpa de todos los sectores)   Coincidió con su colega de Trinidad y señaló que cada vez los requisitos para mover los animales son menos y esto facilita el robo. Agregó que "definitivamente" faltan controles más rigurosos en las vías.   Con respecto al ganadero que fue víctima del robo de 300 cabezas de ganado, este se encuentra muy afectado, prefirió reservar su identidad y no hacer ninguna declaración al respecto debido a que el caso es bastante complejo y las pérdidas económicas incalculables.    Los miembros del sector productivo de la región se encuentran atentos a cualquier movimiento de animales o información que permita dar con su paradero, pues el número de cabezas robadas es bastante significativo. (Lea: 5 modalidades de abigeato que todo ganadero debe conocer)   Asimismo, solicitan a las autoridades correspondientes mayor apoyo y control en las vías de comunicación para intentar hacerle frente a este flagelo que lacera la economía de grandes y pequeños.