El modelo que impulsa la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán-FNG, viene desarrollándose con éxito en esta región del país y cada vez aumenta más el número de productores que le apuestan a su implementación.  

El equipo del proyecto Ganadería Colombiana Sostenible, de la regional del Bajo Magdalena, ha venido apoyando de manera decidida a los productores en el fortalecimiento de su actividad a través de los sistemas silvopastoriles y, adicionalmente, los viene motivando para generar nuevas formas de ingreso, las cuales están orientadas a la sostenibilidad ambiental como uno de sus grandes objetivos.   Uno de los que ha hecho la tarea con juicio es el ganadero Jorge Isaac Pacheco, ubicado en el municipio de Suan, al sur del departamento de Atlántico, desarrollando un nuevo modelo de agro negocio con base en la producción de abonos orgánicos a partir de la bovinaza y residuos orgánicos que se generan en el predio. (Lea: Sistemas silvopastoriles ayudan a conservación del agua)   La idea nació al tratar de disminuir el alto número de moscas en la finca, las cuales no solo aumentaban los costos de producción por la aplicación de venenos, sino que además se convertían en una fuente de trasmisión de enfermedades y en una causa de estrés para los animales.   La respuesta que se ha obtenido en los cultivos ha sido calificado como excelente. Foto: Javier Felipe Ruiz.   Isaac Pacheco decidió, con el acompañamiento técnico del extensionista Jaime Cerpa García, iniciar el piloto en la producción de abonos, utilizando para ello la materia fecal de los bovinos y diferentes residuos de cosecha que se producían en la finca.   Este abono inicialmente tenía como propósito ser empleado en el banco mixto establecido bajo la influencia de proyecto y del cual se abastecen los animales dentro de la finca. Sin embargo, ante el éxito de la iniciativa, ya se encuentra en producción un gran volumen del material, con el fin de abastecer a los ganaderos vecinos y a las entidades interesadas en este tipo de producto.   Actualmente, ya están utilizando materias primas (bovinazas) de otras fincas y resolviendo otro problema con los reservorios de agua, ya que están empleando también las plantas que sedimentan los jagüeyes. (Lea: Los 10 mandamientos del ganadero ecológico)   Con procesos de compostaje como este, el apoyo del gremio y la buena disposición de los ganaderos, estos últimos ven como pueden mejorar sus ingresos y de paso contribuir a la preservación del entorno natural en el que a diario se desenvuelven.