Aunque poco a poco se deja de hablar en los medios del tema, la denuncia por el crédito avalado por la entidad financiera a la empresa brasileña sigue causando estupor entre los productores rurales. El MinAgricultura sigue sin dar explicaciones.   El caso ha dado de que hablar en todos los medios de comunicación del país y puso sobre la palestra uno de los temas más sensibles para quienes trabajan en los campos del país y se deben someter a los interminables trámites y enormes dificultades para acceder a un crédito.   Una de las voces que con mayor fuerza ha sonado es la del presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, José Félix Lafaurie Rivera, quien a través de su columna semanal aseguró que los recursos se están entregando “alegremente, sin requisitos ni garantías y hasta con tasas preferenciales”. (Columna: ¡Más campo para todos!)   Entre las distintas apreciaciones que hace el dirigente gremial, uno de los que más ha denunciado las trabas que se les ponen a los ganaderos a la hora de solicitar créditos, se encuentra la relacionada con las tasas de interés a las que se hizo el crédito a Odebrecht y la que se le ofrece a los productores rurales.   “Me escandalizo porque mientras una mujer rural pobre paga tasas del DTF+7, incluyendo Fondo de Garantías, y un pequeño productor hasta DTF+9, a estos personajes los beneficiaron con DTF+2, la tasa extraordinaria para víctimas del conflicto. ¡Pobrecitos!”, aseguró.   De igual manera, resaltó el hecho de que en el comunicado de prensa que emitió el Banco Agrario para dar explicaciones sobre el tema se trate a los colombianos como “estúpidos” luego de que afirmara que no se había hecho crédito alguno a la empresa brasileña.   Esto porque, según expresó, “todos sabemos que su filial colombiana es dueña del 87 % de Navelena, y que se encontraba en causal de disolución cuando le fue otorgado el préstamo, como lo informó la Supersociedades”. (Lea: Esto se hubiera comprado con plata que Banco Agrario prestó a Odebrecht)  

Las voces de otros ganaderos   Su voz no fue la única que se escuchó. A CONtexto ganadero llegaron varios comentarios a propósito del tema, los cuales se suman a denuncias que ya se han hecho en el pasado a través de este portal frente a las cuales no pasa nada y sí generan llamadas de indignación por parte de funcionarios de la entidad financiera.   Un productor identificado como Rubén Jaramillo relató que le aceptaron un crédito por $150 millones, valor que nunca le fue desembolsado y en lugar de ello solo recibió una tarjeta de crédito por la que terminó pagando una gran cantidad de intereses.   “Al hacer el pago se me entregó mi paz y salvo y 2 meses después me vienen cobrando, usando todos los medios, la suma de $344 mil por honorarios prejuridicos, lo cual consiste un robo flagrante, puesto que en ningún código, ley o dispocicion existe esa figura” relató.   Asimismo, cuestiona cuanta plata le estarán quitando a los campesinos que muchas veces ni se fijan en este tipo de figuras. (Lea: Iragorri preside junta del Banco Agrario que aprobó crédito a Odebrecht)   Otro lector identificado como Nestor relató que presentó una solicitud al banco para un préstamo, trámite en el que duró un año y en el que final debía comprobar que el certificado de libertad era suyo y estaba legalmente expedido.   “Ahí pensé y dije que todo lo que había hecho para acceder al crédito fue una pérdida de tiempo y el banco me hizo perder el tiempo. Esto me sucedió en la sucursal del banco de Trinidad, Casanare”, precisó.   En el mismo sentido se manifestó Arturo Romero, pequeño productor del municipio de Paime, en Cundinamarca, a quien le fue negado un crédito de $5 millones para la compra de una máquina de ordeño en 2015, lo que se convirtió en la razón por la que desistió de volver a usar los servicios del Banco Agrario.   Como esos los casos se repiten a diario en todo el país, solo que ahora que se supo el caso de Navelena la indignación creció. Ha pasado más de una semana de conocerse el caso y el ministro de Agricultura Aurelio Iragorri, quien preside la junta que aprobó al crédito, no ha salido a ofrecer una explicación sobre su actuación. (Lea: Banco Agrario no presta fácilmente a ganaderos pero sí a Odebrecht)   El funcionario, acostumbrado a enviar delegados a muchas de las reuniones que debe asistir, ya había provocado la liquidación del Fondo Nacional del Ganado en 2015, un golpe del que la ganadería no logra comenzar a recuperarse.