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órden público en norte de santander

Foto: elespectador.com

La situación de orden público en Norte de Santander está llevando a la suspensión de actividades de algunas empresas.

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Extorsión tiene en jaque a productores y empresarios de Norte de Santander

por: CONtexto ganadero- 31 de Diciembre 1969

Entre los delitos que afectan a la población de Norte de Santander, la extorsión es uno de los más preocupantes porque ya ha hecho que empresas tengan que parar sus actividades con todo lo que ello conlleva.

La situación de orden público en el país es cada día más complicada. La extorsión, el abigeato, los robos, los asesinatos, etc., son temas que preocupan a la ciudadanía porque van en aumento sin que se vea una solución cercana por parte del gobierno.

En regiones como Norte de Santander, tanto los productores como los empresarios, los comerciantes, el ejército, la policía y la ciudadanía en general se enfrentan a los actos delincuenciales de grupos al margen de la ley.

Uno de los gremios que se pronunció recientemente fue la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite (Fedepalma) que a través de un comunicado público rechazó las extorsiones que se han presentado en la región del Catatumbo, donde campesinos y empresarios de diversos sectores, incluyendo el palmicultor, se han visto fuertemente afectados por este flagelo a manos de grupos al margen de la ley.

En este sentido, el gremio expresó su solidaridad con el sector privado, especialmente el renglón palmicultor, que, en el departamento del Norte de Santander, genera más de 5.600 empleos directos y 8.500 indirectos.

“Es por esto que la agremiación hace un llamado a las autoridades para que se tomen medidas contundentes con el objetivo de garantizar la tranquilidad de todos los habitantes de Norte de Santander”, señala el gremio. (Lea en CONtexto ganadero: ¡Cuidado! Esta es la nueva modalidad de extorsión a ganaderos)

De acuerdo con Fedepalma, este tipo de situaciones ponen en riesgo la operación del negocio, afectando el bienestar de la comunidad, así como la generación de empleo y economía de la región.


Los empresarios


Por su parte el Comité Intergremial de Norte de Santander, que representa a los empresarios y comerciantes, también se manifestó expresando su preocupación por la situación de inseguridad en el departamento. En un comunicado manifiestan su “enérgico rechazo a las extorsiones ejercidas contra los empresarios de nuestro departamento por parte de grupos al margen de la ley”.

Señalan que la preocupación por el flagelo de la extorsión ya se materializó lamentable como es “la suspensión temporal de las operaciones de una de las empresas más representativas de la agroindustria en Norte de Santander. Esta situación afecta no solo las operaciones de extracción de aceite de palma de dicha compañía, sino también toda la cadena de valor del sector, compuesta en un 70 % por palmicultores de pequeña escala”.

Manifiestan que las constantes amenazas y comunicados emitidos por los grupos al margen de la ley, obligan a los empresarios a tomar medidas de fuerza mayor que generan un impacto negativo en las comunidades y ponen en riesgo el compromiso de convertir al Catatumbo en un motor de desarrollo y paz. (Lea en CONtexto ganadero: “En el campo todos los productores pagamos extorsión”, dicen fuentes anónimas)

Al tiempo que reconocen los esfuerzos y el compromiso de las fuerzas militares y de policía, exhortan a las autoridades competentes a tomar medidas contundentes, inmediatas y efectivas para garantizar la tranquilidad de los habitantes de Norte de Santander.

A su vez la Andi seccional Norte de Santander, también se pronunció manifestando su “profunda preocupación por el incremento de la extorsión por parte de los grupos al margen de la ley presentes en el departamento”.

Sostiene el gremio que este delito ha alcanzado niveles alarmantes afectando a todos los sectores económicos y la gravedad del asunto requiere continua atención y denuncia. Las acciones violentas de estos delincuentes “ponen en riesgo el trabajo de más de 15.000 personas en el departamento, afectando distintos sectores y encadenamientos productivos”.

Concluyen señalando que “no podemos permitir que la violencia y la extorsión sigan afectando profundamente el desarrollo económico y social de nuestra región. Es momento de actuar decididamente para proteger el bienestar de los ciudadanos, los derechos de todos los trabajadores y empresarios que día a día contribuyen al progreso de Norte de Santander”.