Un artefacto explosivo de bajo poder estalló este lunes en una vía en el norte de Bogotá al paso de un autobús de la Armada Nacional, informaron autoridades, que calificaron el hecho de "tener vocación de impacto mediático".   "No tenemos al momento una hipótesis más probable (...) Lo que hemos podido establecer es que es un evento con vocación de impacto mediático", dijo en una comparecencia el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas.   5 personas que sufrieron "aturdimiento auditivo" tras el estallido fueron atendidas, según el ministro. Además, "fueron valoradas 20 personas en el sitio, de las cuales 12 fueron trasladadas para asistencia a otro punto", indicó la estatal Defensoría del Pueblo, que vela por los derechos humanos en Colombia.   "Esta es una acción terrorista probablemente contra (...) nuestro personal que va todos los días a laborar en esa área", había dicho antes el general Óscar Hernández, comandante de la Infantería de la Armada Nacional. (Lea: El silencio de Santos ante las amenazas contra Lafaurie)   El estallido se produjo sobre las 8 de la mañana por un dispositivo "de bajo poder, de aproximadamente unos 500 gramos" en la vía a Guaymaral, unos 26 km al norte del centro de Bogotá, dijo Hernández en entrevista con Blu Radio.   Sobre los primeros detalles de la investigación, Villegas anunció que el artefacto fue detonado mediante un cable de unos 70 metros y que el material "al parecer es pentolina".   El vehículo de la Armada, que realizaba un trayecto rutinario en la zona de Guaymaral, llevaba 35 pasajeros, añadió.   Colombia vive un conflicto interno de más de medio siglo en el que han participado guerrillas de izquierda, paramilitares de derecha y fuerzas del Estado y que deja más de 260 mil muertos y 6,6 millones de desplazados, según cifras oficiales. (Lea: Panorama de la seguridad en el sector rural durante 2015)   El Gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc, comunistas) sostienen en La Habana un proceso de paz desde noviembre de 2012, en el marco del cual la principal guerrilla del país mantiene desde julio un cese al fuego unilateral.   Pero en el país actúa también el Ejército de Liberación Nacional, segundo grupo insurgente activo y que aún no se ha sumado a los diálogos de paz, así como bandas criminales vinculadas al narcotráfico nacidas tras la desmovilización de paramilitares promovida por el Gobierno entre 2003 y 2006.   En los últimos días, el Bloque de Búsqueda contra el Crimen Organizado lanzado en febrero por el Gobierno para combatir a los grupos armados ilegales se apuntó varias victorias con capturas de importantes capos narcotraficantes y decomisos de varias toneladas de cocaína.