Las precipitaciones en departamentos como Guaviare, Tolima y Casanare preocupan a los productores agropecuarios de las 3 regiones. Dificultades para movilizar animales, aumento en el costo de la canasta familiar y retrasos en Ciclo de Vacunación, algunos de los inconvenientes. Luego de un prolongado verano, que incluso todavía tiene viviendo difíciles momentos a los productores ubicados en la región Caribe, las lluvias regresaron a otras zonas del país y con una intensidad tal que hay preocupación entre los habitantes de estos 3 departamentos. (Lea: Precipitaciones ponen en riesgo vías terciarias del Uraba antioqueño) En Guaviare, Tolima y Casanare, el agua no para de caer y como consecuencia de ello ya se empiezan a complicar aspectos como la movilidad en las vías terciarias, el costo de los insumos e incluso el Ciclo de Vacunación contra la fiebre aftosa que viene ejecutando la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, entidad que administra los recursos del Fondo Nacional del Ganado, FNG. Aldemar Gavilán Reina, presidente del Comité de Ganaderos del Guaviare, señaló que la situación en su región es crítica por cuenta del aumento de las precipitaciones, que han generado un aumento en los diversos caños que cubren la zona. El dirigente afirmó que el principal río del departamento también tiene un nivel más alto de lo normal, por lo que hay poblaciones en las que ya se han presentado desbordamientos. (Lea: Más de 7.000 ganaderos en Cubará están afectados por el invierno) “En el caso del Ciclo hemos tenido que llamar a los productores y decirles que el vacunador no alcanza a llegar porque las condiciones de las vías son extremas. Esa situación también ha impactado la salida del ganado, toda vez que al estar los accesos en mal estado, los empresarios han tenido que recurrir a trasladar los semovientes a pie”, aseveró Gavilán Reina. El representante de los productores guaviarenses amplió y expresó su preocupación por el costo de la canasta de los insumos, debido a que los camiones que transportan los elementos necesarios para la producción bovina, no están ingresando hasta los centros poblados ante el temor que los tractocamiones se queden atascados en las vías, “por lo que el ganadero debe ir en caballo o moto hasta la población más cercana en búsqueda del alimento o suplementos para sus animales”. (Lea: Zozobra en Meta ante posible desbordamiento del río Ariari) En tanto, en Ataco, municipio ubicado en el sur del Tolima, las lluvias que apenas regresaron hace una semana, ya han perjudicado casi el 40 % de la red terciaria de la población. A eso se le suman algunos deslizamientos que han afectado al menos 20 familias atacunas ubicadas en las zonas rurales. “Las carreteras veredales de San Pedro, Polecito, Chilirco, Casa de Zinc, Campo Hermoso, Paujil y El Brillante, son las más afectadas con el inicio de las precipitaciones,” confirmó John Harold Perdomo, profesional en Gestión Productiva y Salud Animal en Purificación, para el FNG. (Lea: Invierno perjudica a 59 mil bovinos en Saravena) Finalmente, en Casanare el aumento considerable de los aguaceros viene generando temor en las poblaciones ubicadas en las riberas de los ríos Cusiana, Urupía y Meta. De igual manera, ya hay fincas en las que se han presentado anegaciones. Sin embargo, aún no hay registros de pérdidas humanas, animales o eventos que lamentar. (Lea: Condiciones climáticas generan alza en precio del ganado en Santander)