En el marco de un foro realizado en Popayán sobre el tema, el Secretario de la Cartera aseguró que esta actividad ha venido afectando seriamente a 12 municipios, por lo cual es necesario trabajar desde las instituciones para disminuir el impacto ambiental de forma urgente.

Durante el conversatorio denominado “La locomotora minera en el Cauca: estaciones de un conflicto ambiental y social”, que se llevó a cabo en Popayán con el objetivo de promover el debate y la reflexión sobre las consecuencias económicas, sociales y ambientales que el ejercicio de esta actividad en la región, desde la Secretaría de esta materia, se pidieron más acciones para controlar estas explotaciones. (Lea: En Ibagué, más de 2mil personas se movilizaron contra la minería)

Según expuso, Aníbal Melo Martínez, encargado de la Cartera de Desarrollo Agropecuario y Minero, durante el evento que tuvo lugar en el Paraninfo Francisco José de Caldas, la situación que vive el departamento es difícil y preocupante.

“El problema es complejo y la normatividad no nos permite garantizar mucha efectividad. Sin embargo, desde la institucionalidad, con la Corporación Autónoma Regional del Cauca, la Agencia Nacional de Minería, la Fiscalía y las Alcaldías estamos generando estrategias para evitar que esta actividad siga afectando el medio ambiente y la sociedad”, señaló Melo Martínez. (Lea: Minería ilegal y cultivos ilícitos preocupan a Caquetá hoy por hoy)

Por su parte, Francisco Vidal, subdirector de Gestión Ambiental de la Corporación Autónoma Regional del Cauca, CRC, aseguró que los impactos ambientales generados por la minería en el departamento son muy altos, pues se está presentando una grave afectación en ecosistemas importantísimos del Pacífico caucano, siendo las especies endémicas las más perjudicadas; esto ha ocurrido por la gran cantidad de cuerpos de agua y la descomposición social de las zonas.

“Hay zonas críticas donde se ha evidenciado una gran problemática de ilegalidad y la presencia de enclaves con aproximadamente 200 retroexcavadoras, además en la zona del Patía y sus afluentes, como Guachicono y Mazamorras, en el norte se encuentra una problemática por el uso de mercurio, siendo los municipios de Suárez y Buenos Aires, los más afectados”, sostuvo Vidal. (Lea: Bolívar le apuesta a la minería sostenible)

Desde el departamento piden que el Gobierno Nacional se involucre en la solución de un problema y cortar de raíz las consecuencias de este flagelo.