El pasado 29 de mayo, gracias al programa que lidera la Fundación Colombiana Ganadera, Fundagán, y la empresa de telefonía Claro, se entregaron 11 bovinas preñadas, que servirán como sustento alimenticio y económico para beneficiarios de la región.
“Mi mamá tenía un granero, pero debido a las deudas, lo perdimos. Desde hace 4 meses a ella le toca trabajar en otras fincas haciendo jornales”, explica Marisa Zambrano, hija de Amira Vallejo, beneficiadas con una de las 11 vacas que se entregaron en Nariño, gracias a la donación de la empresa de telefonía móvil Claro y la Fundación Colombiana Ganadera, Fundagán.
“Mi esposa, mi hija de 8 meses y yo hemos podido subsistir porque afortunadamente en el pueblo siempre recibimos la colaboración de amigos y de la familia. La verdad es que esta vaquita llega en el mejor momento porque gracias a Dios nos han prestado la ayuda que necesitábamos”, asegura Wilman Maya, habitante del municipio de Gualmatán quien también se vio beneficiado con la entrega de un ejemplar bovino.
Marisa y Wilman expresan el mismo sentimiento: alegría. Pero también son conscientes de la realidad que viven. (Lea ‘El soldado Andelfo y su familia reciben una 'vaca por la paz'’)
“En mi casa vivimos mi mamá, mi hermana de 14 años y yo, que tengo 17 años. A esta vaquita la vamos a cuidar mucho y vamos a empezar a vender la leche para poder salir adelante”, sostiene la hija de Amira Vallejo.
“Mi esposa sale a diario a hacer jornales, sembrando y cosechando papas y arvejas. Mientras que yo trabajo en una emisora comunitaria, aunque no me pagan, pero este es el medio para buscar amigos para que le ayuden a uno, sobre todo a movilizarme, a veces me dicen: “¡Wilman, ya es hora!, vamos tranquilo que nosotros te damos una mano, queremos escucharte”, Maya lo dice ya que padece de parálisis en las piernas.
Con la llegada de una nueva integrante…
“Es un sentimiento increíble e indescriptible cuando se recibe una vaca, porque nadie había hecho esto por nosotros, esta es una gran ayuda”, comenta Marisa.
“Es una dicha muy grande, no hay palabras para explicar lo que se siente cuando regalan una vaquita. Con mi esposa pensamos vender parte de la leche y la otra dársela a la bebé. Ahora sólo nos queda esperar que nazca la primera cría, cuidarla muy bien y ponerle las vacunas para que nos dé la leche que tanto nos hace falta”, indica Wilman.
“¿Qué hacer una vez nazca? Pues ayudar a la gente”, asegura la niña de 17 años, recién graduada del colegio. “Porque así como nos brindan una oportunidad a nosotros, otra gente necesita esta ayuda, sería excelente darle esta alegría a otra familia”, puntualizó el padre de familia.
La entrega de estas 11 vacas preñadas a 11 familias es posible gracias al programa ‘Una vaca por la paz’, que lidera la Fundagán y que a esta iniciativa se unió la empresa Claro, que entrega en total 67 vacas en 4 ciudades. (Lea ‘Fundagán y Claro entregarán 67 vacas preñadas en 4 ciudades’)
(En la foto Janeth Chamorro Hernández una de las personas beneficiadas por el programa 'Una vaca por la paz')