La notable disminución se ha registrado en la última década, desde que comenzaron las variaciones climáticas de los fenómenos de La Niña y de El Niño. Las variaciones climáticas han afectado seriamente a la ganadería de esta región del departamento de Cundinamarca, a tal grado que, en los últimos 10 años, disminuyó la producción de un millón a 750 mil litros de leche diarios.(Lea: 10 componentes que agobian la producción ganadera del Valle de Ubaté) Así lo manifestó Guiovanni Pinilla Quiñonez, ganadero de tradición, médico veterinario y representante legal de la Asociación de Ganaderos del Valle de Ubaté, quien a la vez, dijo que, “la producción se ha mermado en 25 %, es decir, en 250 mil litros diarios”. Según el líder gremial, esto se atribuye a que cuando vino La Niña hubo bastantes inundaciones en casi todo el Valle y eso ocasionó la migración de animales a otras zonas del país y estos vacunos no regresaron a la región. Desde entonces y hasta la fecha se ha presentado diversos cambios del clima con sus fuertes consecuencias y afectaciones que han propiciado el cierre constante de ganaderías. “Considero que los avatares y los vaivenes propiciados por los cambios climáticos permanentes, han generado la perdida de esta fracción productiva en esta región del departamento de Cundinamarca”, sostuvo. Situación actual De acuerdo con Pinilla Quiñonez, “ahora con el fenómeno de El Niño, las lluvias escasean; se presentaron heladas que afectaron las praderas de algunos municipios; y cesaron las mismas pero las atacan los fuertes vientos que, igualmente, las resientes de manera notable e inhiben su crecimiento”. (Lea: Heladas y precio de leche trasnochan a ganaderos del Valle de Ubaté) Actualmente las temperaturas han sido muy altas en el transcurso del día, incluso han llegado hasta los 25 grados centígrados en una región caracterizada por una temperatura promedio de 14.5 °C y donde generalmente varía de 7 °C a 19 °C y rara vez baja a menos de 2 °C o sube a más de 21 °C. . “La fuerte radiación solar ha resentido, asimismo, el crecimiento de las pasturas, y de manera simultánea, escasea la comida que como consecuencia deja la decadencia permanente de los animales”, explicó. Otro factor que ha afectado la ganadería de esta región es la disminución del recurso hídrico, que se ha originado, por una parte al verano, y por otra, a que la CAR realiza actualmente trabajos de limpieza y de profundización a los ríos Suta, Lenguazaque y Ubaté, y eso hace que el agua se estanque y no fluya de manera normal. (Lea:Con la siembra de silvopastoriles se contrarrestan las heladas) “Los municipios que más se han afectado con el fenómeno de El Niño han sido Carmen de Carupa, Lenguazaque, Fuquene, Guachetá, Suta y Ubaté”. En síntesis, cada día se complica más el tema de la provisión de comida. Los ganaderos que tenían algún excedente la venden bastante costosa, y de hecho, ya cuentan con pocos recursos. Estos factores han afectado el volumen de producción, pero no han incidido en el precio de la leche, aunque los productores no dejan de manifestar su preocupación y manifiestan su expectativa son respecto al mismo. “Precisamente los ganaderos del Valle de Ubaté, agobiados por la falta de comida para el ganado, solicitamos mediante una carta al Ministerio de Agricultura, que fuéramos incluidos en el programa de apoyo de suplementos alimenticios, sobre la cual esperamos respuesta”, puntualizó el dirigente del Valle de Ubaté.