Los ganaderos se han quejado por las prohibiciones ordenadas por la Cuenta Nacional de Carne y Leche, CNCL, que incluyen revisar a los bovinos que puedan tener reacciones alérgicas adversas. En los últimos días se han presentado los decesos de 3 animales en distintos municipios.   De acuerdo con una persona cercana al proceso, hasta el momento se han presentado 3 muertes de vacunos: una en Aquitania el pasado lunes 30 de octubre, la segunda en Monguí el martes 31 y la última el jueves 2 de noviembre.   Aunque en los últimos días no se conocen más casos, la fuente afirmó que no es claro si se han presentado más decesos o si no se han reportado ante el ICA o las organizaciones ganaderas que ejecutan el ciclo. (Lea: Nuevos inconvenientes del segundo ciclo de 2017 en Valle del Cauca)   “Cuando hablé con una persona del gremio ejecutor, me contó unas cosas que a mi modo de ver, me dan rabia y tristeza porque una tarea que se había construido con la mayor rigurosidad y el mayor compromiso, se está botando a la basura”, señaló Uriel Rojas*, un médico veterinario de la región.   En primer lugar, el profesional señaló que la CNCL prohibió a los vacunadores portar el medicamento Alervec en sus cavas. Este medicamento es un antialérgico que se utiliza en casos de reacciones adversas a la aplicación de biológicos, como el que se usa contra la fiebre aftosa.   Esto a pesar de que el laboratorio suministra el producto junto con la vacuna, y de que incluso los mismos gremios ejecutores lo adquieren para evitar este tipo de incidentes. (Lea: Segundo ciclo de vacunación de 2017 inicia con dudas y traumatismos)   De igual manera, está prohibido que los vacunadores o los médicos veterinarios atiendan estas reacciones, ni tampoco los decesos de bovinos. Si bien hasta ahora solo se han reportado 3, Rojas afirmó que la pérdida de un solo animal es grave si se tiene en cuenta que la mayoría de productores de la zona son propietarios de minifundios con menos de 10 animales.     A esto se suma la prohibición de practicar autopsias a estos ejemplares, por lo cual no se puede tener certeza si un bovino murió por otra razón distinta a una reacción al biológico.   “Un médico veterinario fue a Aquitania a practicar la necropsia y le hicieron un llamado de atención terrible, hasta con insultos. Dijeron que posiblemente le costaba el puesto”, sostuvo Rojas. (Lea: Ganaderos extrañan a Fedegán como operador del ciclo de vacunación)   Agregó que la CNCL ha expresado que no hay personal suficiente para acudir a estas emergencias, por lo cual deben remitir los casos a la oficina local del Instituto Colombiano Agropecuario, ICA. No obstante, los productores se han sorprendido porque los funcionarios de la entidad sanitaria aseguraron que no lo iban a hacer.   “El proyecto está manejado por un ingeniero que no tiene idea, y la coordinadora departamental de la CNCL es una administradora de empresas. Me parece muy grave que no haya un médico veterinario al frente del programa sanitario”, manifestó Rojas.   CONtexto ganadero intentó comunicarse con funcionarios de la CNCL para tratar el tema, pero recordaron que el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, a través de su actual administrador, Fiduagraria, les ha prohibido dar declaraciones a cualquier medio.   *Nombre cambiado a petición de la fuente