Este espacio, en el que trabajará todo el departamento de la mano del Ministerio de Agricultura, la Alcaldía de Bogotá, Policía y Fiscalía, busca que fomentar la producción agropecuaria en aras de garantizar que los cundinamarqueses puedan acceder sin traumatismos a los alimentos.
Mediante el Decreto 186 del 06 de abril de 2020, el gobernador, Nicolás García Bustos creó la Mesa Departamental de Coordinación para el Abastecimiento y la Seguridad Alimentaria, la cual se encargará del seguimiento, evaluación y control de la cadena de producción, distribución y suministro de alimentos e insumos de primera necesidad durante el periodo que dure el Estado de Emergencia Económica, Social y Ecológica declarado por el Gobierno Nacional. (Lea: ‘Del Cauca a tu mesa’, una apuesta por reducir intermediarios)
La mesa está conformada por el ministro de Agricultura o su delegado, el secretario de Agricultura de Cundinamarca que a su vez es quien la preside, a él se le suman los secretarios de Gobierno, Competitividad y Desarrollo Económico, Integración Regional, Salud y el jefe de la Oficina Asesora de Planeación Agropecuaria.
Además, habrá representantes de un gremio, transportadores, aliados comerciales, asociaciones campesinas, la secretaría de Desarrollo Económico de Bogotá, la Policía de Cundinamarca y la Fiscalía.
Entre las funciones de la mesa está la de planear y ejecutar acciones encaminadas a incentivar la producción agropecuaria en el Cundinamarca con el propósito de garantizar el abastecimiento de alimentos para los habitantes del territorio del departamento. (Lea: Antioquia crea grupo para prevenir acaparamiento de alimentos)
A eso se le suma un seguimiento a la disponibilidad y abastecimiento de alimentos e insumos de primera necesidad en el territorio en coordinación con el Gobierno Nacional. Así como asegurar las condiciones logísticas y de seguridad que permitan el transporte de los productos agropecuarios con el propósito de garantizar la seguridad alimentaria del departamento.
Uno de los aspectos más importantes consiste en establecer mecanismos de estabilidad de precios que reduzcan el impacto cambiarlo sobre los insumos del campo, en pro de lograr mitigar los efectos que la coyuntura actual tendrá sobre la producción agropecuaria.
Este espacio entró a operar desde el pasado 6 de abril y tendrá vigencia hasta el tiempo que dure la Emergencia Económica, Social y Ecológica bajo la que se encuentra el país desde el mes de marzo. (Lea: En Meta celebran decreto que regula precios de alimentos)