Los efectos del COVID-19 se hacen evidentes con el pasar de los días, razón por la cual los productores de algunas regiones del país se encuentran preocupados ante la notable disminución en el consumo de algunos productos.

A pesar que el departamento del Quindío no se encuentra atravesando por ninguna dificultad generada por el aislamiento preventivo obligatorio, productores prevén que a medida que aumenten los días de cuarentena, el consumo de algunos alimentos como la carne de res disminuirán en niveles exponenciales. (Lea:En Quindío crearán ruta competitiva que impulse el sector ganadero)

Jorge Tejada Galvis, director ejecutivo del Comité de Ganaderos del Quindío, indica que hoy en día todo ha vuelto a la normalidad en el departamento, teniendo unos productores lecheros más conscientes de la importancia de la asociatividad.

“Nosotros hemos venido con unas tasas de sacrificio normal, así como con un consumo de proteína roja estable, pues todavía no se han presentado efectos de la situación sanitaria de que se está viviendo en Colombia y en el mundo”, explicados Tejada Galvis.

Esto demuestra que la situación por la que atraviesa el departamento de Quindío se mantiene y no se han encontrado consecuencias graves en la seguridad alimentaria de la población. (Lea: 3 inquietudes que preocupan a los ganaderos en Quindío)

El consumo de la canasta familiar en el departamento se ha presentado de forma estable. Situación que puede cambiar, pues de acuerdo al dirigente gremial, con el aumento de los días de la cuarentena las personas podrían tener problemas económicos, lo que ocasiona que eliminen de su mercado algunos productos.

"Se prevé por parte del gremio cúpula y del Gobierno Nacional, que si el aislamiento preventivo obligatorio se alarga, entonces muchas familias sin ingresos comienzan a suprimir elementos de su canasta básica, por lo que con muchísima probabilidad la carne de res sea uno de estos”, manifiesta Tejada Galvis.

Todo esto, teniendo en cuenta que son muchas las personas que actualmente no tienen ingresos y se encuentran imposibilitados para salir a buscar alimentos por la cuarentena, lo que genera que las familias sean más vulnerables y comiencen a sufrir de hambre.

Lo anterior, generaría una acumulación de productos provenientes de los animales, así como una pérdida exponencial para quienes se encargan de trabajar diariamente con el campo para llevar a la mesa alimentos como la carne de res.

Finalmente, Tejada Galvis concluye hasta el momento todo se maneja bajo una normalidad, pero la preocupación es constante para los productores, quienes temen por la discusión del consumo de sus productos por parte de la población. (Lea: En Quindío preocupa bajo precio de leche e informalidad)