Gracias a la gestión realizada por la gobernadora del Quindío, Sandra Paola Hurtado, los productores agrícolas y ganaderos de la vereda de Navarco tendrán una manera más sencilla de sacar sus productos para venderlos.

Hacia las 11 de la mañana del pasado miércoles 9 de octubre, llegaron al municipio de Salento, en el departamento de Quindío, las estructuras de los dos puentes que apalancó la gobernadora Sandra Paola Hurtado Palacio con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo y Desastres, con el objetivo de beneficiar al sector agropecuario luego de que sufriera los rigores del invierno del año pasado. (Lea: Salento quiere fortalecer la competitividad ganadera)

Los puentes, que tuvieron un costo cercano a los $72 millones y salieron del sector de Puente Aranda en Bogotá el día anterior, beneficiarán a los habitantes de las veredas de Navarco bajo y alto, pues con estas estructuras servirán para comercializar los productos de la región y resarcir el derecho a la libre movilidad de los habitantes.

“Nosotros tuvimos que aportar el transporte y $31 millones con el apoyo de la Secretaría de Aguas e Infraestructura. Son dos puentes metálicos de 18 y 42 metros, que serán instalados por expertos para terminar con el calvario que vivían las gentes de Salento, pues estaban como sitiados, sin poder salir de las veredas y sin lograr comercializar sus productos”, sostuvo Hurtado Palacio.

La primera de las estructuras en Navarco bajo, que pasará sobre el río Boqueron, tiene un diámetro de 42 metros y consta de 26 elementos entre láminas, cables, tornillos, grilletes y mallas. Sobre el río Navarco pasará la otra estructura con 18 metros de luz y además será soportado con postes y rodillos.

Nelson Arango, un productor lácteo que tiene ubicado su hato ganadero en la vereda Navarco, tenía que transportar la leche que produce en su finca en el lomo de un caballo, para poder venderla en otros municipios. (Lea: Flores y frutas de Quindío llegarían hasta Egipto y Líbano)

“Desde hace años tenía que movilizarse de esta forma, pues con los daños permanentes en las vías y la falta del puente era imposible hacerlo de otra forma. Esta situación me hacía perder más de una hora diaria para poder sacar la leche. Ahora, el cuento es otro”, añadió Arango.

Para el ingeniero Juan Manuel Benavides, secretario de Infraestructura local, con estos puentes la calidad de vida de los habitantes del municipio quindiano mejorará ostensiblemente, así como su economía.

“Las familias de Salento llevaban varios meses atravesando el río arriando las mulas en las que transportan la leche que producen. Estaban arriesgando sus vidas porque el paso es era bastante peligroso. Estas personas, que tenían que caminar alrededor de una hora para salir a la vía por donde pueden transitar vehículos, ya tenderán un acceso más sencillo para comercializar sus productos”. Sostuvo Benavides.