La picadura de ‘chagas’ tiene en alerta a la población de la región, la cual después de tener que enterrar a más de 20 mil animales producto de la sequía que azotó al departamento, ahora sufre las consecuencias que genera el insecto. Al menos 20 personas ya están afectadas.
Luego de la crisis ambiental que se vivió en Paz de Ariporo y en varias veredas de la población casanareña por cuenta de la sequía, que obligó incluso a incinerar más de 20 mil animales por la resequedad de los pozos, ahora la población se enfrenta a las chagas, enfermedad que se transmite por la picadura del mosquito 'pito' y que hasta el momento ya tiene a 20 personas afectadas y con incertidumbre a los habitantes de la región. (Lea: ¿Qué afectó realmente el ecosistema de Paz de Ariporo?)
Alfonso Martínez Abril, profesional en Gestión Productiva y Salud Animal en la zona de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, aseguró que tras la crisis sanitaria que vivió el municipio, ahora la picadura del insecto es el nuevo inconveniente que deben enfrentar los pazariporeños.
“Estamos esperando la llegada de una delegación del Ministerio de Salud, quienes vienen a revisar a las personas que están enfermas para poder determinar el origen de las chagas y las prevenciones que hay que tomar en la región para evitar que más habitantes se enfermen”, expuso Martínez Abril. (Lea: Más de 3.000 reses muertas por verano en Arauca y Casanare)
¿Qué es la enfermedad de chagas?
El Trypanosoma Cruzi como se conoce a las chagas, comprende una población heterogénea de parásitos que circula entre animales silvestres, domésticos, insectos triatominos y el hombre. Aquellos triatominos que se relacionan con el hombre en su ambiente, son los que tiene especial importancia al momento de la transmisión.
El mal llega al ser humano a través de una picadura o el contacto con las heces de animales que están infectados por el insecto, lo que le permite invadir gran variedad de células, donde se transforma para dar lugar al amastigote, el cuál es la forma replicativa intracelularmente. (Lea: 70% de las enfermedades que afectan a humanos proviene de animales, según la FAO)
Un documento revelado por el Instituto Nacional de Salud explica que la enfermedad se inicia con una fase aguda caracterizada por síndrome febril infeccioso y parasitemia.
En los casos agudos no tratados, la enfermedad progresa hacia la fase crónica, donde un porcentaje grande de personas permanecen asintomáticas (aproximadamente 70%) y sin compromiso clínico (la llamada forma “indeterminada”), pero un grupo desarrolla, después de un periodo que puede ir de 10 - 30 años, lesiones irreversibles, especialmente cardiacas.
Así opera la infección desde que está en el ambiente hasta que entra en contacto con el hombre. Foto: dpd.cdc.gov.
“Si el parásito no es eliminado mediante tratamiento etiológico durante el episodio agudo o, con menos posibilidad de éxito, en etapas posteriores, en general se considera que la persona va a permanecer infectada por el resto de la vida”, explica el texto.
Según explicó Julián Alberto Betancur, infectólogo de la Universidad de Antioquia y especialista de la Clínica Las Américas, es poco común este tipo de enfermedad, lo que dificulta la consecución de los medicamentos que se necesitan para tratar el mal cuando está en su fase aguda. (Lea: Enfermedades de rebaño afectan a la producción más que epidemias)
“Nifurtimox y benzonidazol son las medicinas con las que se puede combatir el ‘chagas’, siempre y cuando se detecte a tiempo, de lo contrario el paciente puede empezar a presentar problemas de colon y corazón. En ese caso se procede a operar de megacolon o el paciente debe empezar a usar un marcapasos”, remató el experto.