En Caquetá hace 15 días que se dejó de recoger el lácteo, por lo que productores hablan de pérdidas cercanas a los $30 mil millones. En Huila, una cosecha de café avaluada en $17 mil millones está a punto de perderse por la falta de mano de obra.

Los efectos que dejan los 12 días del paro siguen siendo críticos en el sector lácteo. Millones de litros de leche no fueron acopiados en Caquetá, Huila y parte de Boyacá, por cuenta de los bloqueos, algunos de ellos intermitentes, que hay en estas 3 regiones. El panorama no parece cambiar, ya que según manifestó Víctor Correa, vocero del Movimiento por la Defensa y la Dignidad de los Cafeteros Colombianos, las negociaciones entre las Dignidades y el Gobierno solo se retomarán el próximo martes 13 de mayo.  (Lea: Garzón reclama al Gobierno una verdadera política agropecuaria)

No obstante, mientras los diálogos entre ambas partes siguen paralizados, las afectaciones en estas 3 zonas no se detienen. Aunque todas las miradas están centradas en Huila, por cuenta de los bloqueos, es Caquetá, el departamento que más perjudicado se ha visto hasta el momento por cuenta de la parálisis que hay en la vía que comunica a esta zona con el centro del país.

Según explicó Hugo Rodríguez, coordinador de la Unidad Regional de Desarrollo Ganadero de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, para la región, los productores lácteos son quienes más pérdidas han registrado desde que empezó el paro el pasado 28 de abril, ya que desde el viernes 25, Nestle les dejó de recoger la leche, lo que equivale a 15 días en el que los productores están a merced de los queseros o se dedican simplemente a cuajar el producto. (Lea: “Sector agro se derrumba y Santos de rumba”: Marta Lucía Ramírez)

“Cifras consolidadas entre el Comité Departamental de Ganaderos del Caquetá y la Cámara de Comercio de Florencia, nos permite sostener que las pérdidas diarias son de $2.000 millones, es decir, los empresarios lácteos han perdido $30 mil millones. Mientras que la venta de bovinos que van para sacrificio hacia el Huila y el centro del país está quieta, lo que ha impedido que se vendan cerca de 800 reses diarias”, expresó el funcionario.

La situación en Huila no es muy diferente, en el especial al sur del departamento. Allí, 30 mil litros diarios del lácteo están dejando de ser recogidos, lo que representa pérdidas cercanas a los $300 millones. Sin embargo, la situación más preocupante en esta zona del país es para los caficultores. (Lea: Acusan al Gobierno de no tomarse en serio el Paro Agrario)

Así lo confirmó Calixto Yucumá, presidente del Consejo Gremial de Garzón, uno de los municipios más convulsionados por cuenta del paro. Yucumá aseguró que por cuenta de los bloqueos y la parálisis en la que se encuentra la población, una carga de café avaluada entre $17 mil y $20 mil millones, está en riesgo de perderse ante la falta de mano de obra para recoger el grano, ya que toda se encuentra en las vías.  

Por su parte, Óscar Triviño Gil, presidente de la Asociación de Ganaderos de Boyacá, Asogaboy, manifestó que la situación en el Altiplano cundiboyacense no es tan crítica como en otras regiones del país, pero rechazó la actitud que ha tomado el Gobierno frente al paro.  (Lea: Tensa calma viven productores lácteos en Boyacá por Paro Agrario)

“Es lamentable que el Estado hasta que no se ve sometido a presiones de esta naturaleza no pone su mirada en el sector, no se ven intenciones de que la situación cambie. Además, es preocupante que en todas las negociaciones se hable solo con las dignidades, pero no se tengan en cuenta a los gremios”, apuntó el dirigente.

Nuevo cacerolazo en favor del paro

El pasado jueves 8 de mayo en horas de la noche, cientos de colombianos salieron a las calles de sus ciudades en apoyo al paro agrario que ya completa 12 días. La iniciativa fue promovida por César Pachón, líder de Dignidad Agropecuaria, quien desde la mañana del miércoles, 7 de abril, se encadenó en la Plaza de Bolívar de Bogotá, en rechazó a la suspensión de las negociaciones entre el Gobierno y los voceros de los campesinos. (Lea: Efectos del paro cada vez son más graves)