En la subasta de Aguazul en Casanare mientras el precio de ganado desteto bajó hasta en 6,3 % y el volumen de negociación se incrementó en 14%. Todo indica que el detrimento de los precios del ganado es aprovechada por quienes tienen mayor margen como oportunidad de negocio.   Ante la angustiante situación sanitaria de la ganadería bovina que la condujo a la pérdida del estatus de país libre de fiebre aftosa con vacunación, los precios de los animales se cayeron en la mayor parte del país, y de hecho, asimismo sucedió en el municipio de Aguazul en el departamento de Casanare donde igualmente descendieron pero, contrario a ello, el volumen de negociación de la subasta aumentó. (Lea: Última hora: Nuevo foco de aftosa en Boyacá)   Expertos manifiestan que es algo que sucede en todos los mercados y el de la ganadería bovina no es la excepción. Se refieren incluso al dicho popular que “en río revuelto, ganancia de pescadores”.     “Y es que en la subasta de Aguazul mientras los precios bajaron hasta en $400 el kilo, las negociaciones se dispararon y aumentaron 14 % en solo 15 días”, manifestó Guillermo Nossa Moreno, presidente de la Asociación de Ganaderos de Aguazul- Casanare.   La subasta que usualmente comercializa 700 animales cada ocho días, en las dos últimas semanas ese volumen se incrementó y ha cerrado en las últimas dos jornadas de negociación en 800 cabezas.   Según el dirigente, “con el precio ha sucedido lo contrario. El del macho desteto de 200 kilos de peso no bajaba de $4.800 el kilo y el miércoles pasado se negoció a $4.500”.   Esa situación significa un declive considerado dramático por los productores, pues equivale a una pérdida del 6,6 %.   Lo mismo sucedió con las vacas que se negociaban a $3.400 el kilo y dicho precio se descolgó a $3.000, lo que significa una caída del 13,3 %. (Lea: Cae precio del ganado gordo en varias regiones del país)   Es una situación difícil porque se trata de un sobresalto de gran impacto y de alto valor que pierden los ganaderos al vender una res. (Lea: $320 mil millones se han dejado de negociar en la zona de contención)   “Esta situación afecta en materia económica a los ganaderos de esta región en donde el 80 % de los predios de Aguazul tienen menos de 50 animales”, puntualizó Nossa Moreno.