Un posible cierre de la vía Panamericana por parte de los indígenas y los constantes ataques perpetrados por los nativos a los predios pecuarios, atentan contra la tranquilidad y seguridad de los empresarios en la región.

En el marco de la celebración del Día de la Raza, más de 7.000 indígenas caucanos se dieron cita en Piendamó, con el propósito de debatir acerca del cumplimiento de algunos compromisos por parte del Gobierno Nacional, los cuales fueron acordados el año pasado tras una serie de bloqueos organizados en la vía Panamericana. (Lea: Indígenas del Cauca amenazan a ganaderos de la región)

No obstante, esta reunión alteró la tranquilidad de los ganaderos y comerciantes caucanos quienes ven con temor este encuentro, ya que hay rumores de que los nativos pueden obstruir la carretera, lo que generará desabastecimiento de alimentos en tiendas, supermercados y empresas pecuarias de la región.

Juan Pablo*, productor bovino ubicado en Popayán, aseguró en diálogo con CONtexto Ganadero, que el temor es latente debido a que los ganaderos han salido a comprar el doble de insumos, lo que ha disminuido el flujo de caja en la gran mayoría de explotaciones de la región. (Lea: Atentado contra ganadero en Cauca refleja inseguridad regional)

“Nosotros sabemos que para los indígenas bloquear las vías en un negocio. De esa forma presionan al Gobierno y obtienen más tierras, recursos o auxilios, por lo que debemos ser precavidos y prepararnos de cara a un posible cierre de la única carretera que tenemos con el centro del país”, argumentó el empresario.

Pero el problema no acaba ahí, los mismos indígenas que están en la reunión extraordinaria, con el afán de conseguir terrenos comprados con dinero prometido por el Gobierno, vienen violentando los predios de ganaderos y productores, generando temor e inseguridad entre la población. (Lea: Indígenas mantienen bloqueadas vías en el Cauca)

El agricultor Augusto*, aseguró que aunque este tema ha venido disminuyendo no ha cesado en su totalidad, siendo el motivo que más temor genera en el departamento, incluso más que la presencia de guerrilla o bandas criminales.

“Acá los problemas de extorsión o secuestro han caído considerablemente, pero el problema son los ataques y las invasiones indígenas, porque ellos son capaces de quemar los pastos y atentar contra las fincas, con el propósito de que los propietarios se aburran y vendan a un precio muy bajo, favoreciendo los intereses de la comunidad”, precisó el agricultor. (Lea: Tras acuerdo entre Indígenas y Gobierno, finalizó la minga)

Es tal el alcance de los indígenas, que en otra propiedad se robaban las cabezas de ganado buscando presionar al dueño de un predio, y como este no prestó atención a las amenazas, los nativos 'pelaron' varios animales.

“Son unos casos de barbarie que lo dejan a uno sorprendido. Es más, como los campesinos han visto que ese método de presión funciona, ellos han recurrido a lo mismo. Hace unos días acabaron con una producción de espárragos de la que dependían cientos de familias”, reseñó Amanda*, ganadera del departamento. (Lea: Atentado en vía Panamericana oscurece panorama del sector)

Este diario quiso conocer la impresión de las autoridades frente a estos hechos, pero no hubo respuesta por cuenta de los uniformados que hacen presencia en esta zona del país.

*Nombres modificados por petición de las fuentes.